Jacob Petrus: "Ya es imposible informar del tiempo sin hablar de cambio climático"

Es frecuente que los medios de comunicación den la espalda a nuestras verdaderas preocupaciones. Pero, en el ojo de ese huracán, Jacob Petrus, un geógrafo dedicado desde hace años a la información meteorológica, ha apuntalado con éxito en la parrilla de TVE el programa diario Aquí la Tierra, del que es director y cara visible, y que retrata, explica y pronostica cómo incide el clima en nuestro día a día, acumulando premios (como el Ondas) y más de un millón de espectadores diarios.

Se acerca Semana Santa. Me la imagino como la época más estresante para un meteorólogo, con el público presionándolo para saber si se puede ir a la playa, el sector turístico rezando para que no le arruine el negocio…Totalmente. Está claro que es nuestra peor época del año (risas). Primero, porque en ella el tiempo es muy variable, marzo y abril te pueden dejar episodios meteorológicos para todos los gustos. Además, estamos hablando de un periodo de diez días, si lo cuentas desde el viernes antes del Domingo de Ramos hasta el Lunes de Pascua, y tener que resumir ese periodo en un solo pronóstico para toda España es muy complicado. Tiende a decirse que en España siempre llueve en Semana Santa, y no es así, llueve en algunas zonas, y no siempre. Por otro lado, también hay una responsabilidad enorme con las procesiones, las cofradías necesitan saber si su talla del siglo XVI corre riesgo de mojarse, y por tanto de sufrir daños irreparables. La responsabilidad es muy grande y hay que ser muy prevenido. Pero, ¡para eso estamos!

¿Somos injustos con los meteorólogos, criticando sus pronósticos sin entender que la suya no es una ciencia exacta? No, eso ha cambiado mucho. Aquel perfil de Eugenio Martín Rubio apostándose el bigote ya no existe. La gente, en general, ya sabe que la meteorología es una ciencia que acierta muchísimo a la hora de pronosticar, y por eso las exigencias son cada vez más elevadas. Antes te decían que el domingo iba a llover, pero ahora te dicen que el domingo lloverá a tal hora, en tal calle y con una intensidad tal que necesitarás una carpa. La sensación con el público es muy buena, y eso que no siempre se consume la información meteorológica de la mejor manera, sin atender a explicaciones sobre el concepto de probabilidad, leyendo mal un mapa isobárico, no entendiendo qué significa un cielo nublado… Nosotros debemos desenmarañar los datos.

Mucha gente se informa del tiempo con una app, pero Aquí la Tierra aporta contexto y clarifica conceptos como borrasca, presión atmosférica… Creo que es una tendencia mundial. Aquí, Mónica López, jefa de tiempo de TVE, ha marcado un antes y un después haciendo la información meteorológica más accesible. Yo también soy de esa escuela, creo que la forma de comunicar tiene que ser muy clara. Es imposible limitarse a ofrecer información meteorológica sin enlazar con el cambio climático, el estado de los embalses, la floración y los niveles de polen… Ofrecemos un espectro más realista. 

Y es que a pesar del tono amable del programa, las circunstancias les imponen hablar de despoblación rural o cambio climático. Sí, en el fondo es una suerte poder afrontar temas que están muy de moda, que interesan e influyen. El cambio climático es uno de esos temas de la última década de los que tenemos que hablar constantemente. Es una realidad, y tenemos que analizar cómo nos afecta, enlaza con nuestro objetivo de sensibilización medioambiental, que por cierto también está muy dirigido a los niños. También intentamos conectar con la naturaleza y el medio ambiente, a menudo, a través de lo rural, porque las ciudades se han convertido en espacios totalmente ajenos a la naturaleza, viven de espaldas a ella, y en lugar de irnos a un Parque Natural nos vamos a zonas rurales, que son las que siguen teniendo contacto con la naturaleza.

¿A los españoles nos falta educación medioambiental? Es algo que está cambiando muchísimo. No tiene nada que ver la de nuestros padres con la de nuestros hijos. Depende de qué generación mires, aunque siempre hay algo que mejorar. Nuestros padres, debido al contacto que han tenido con la naturaleza, tienen comportamientos más respetuosos con ella (aunque no lo suficiente). Los chavales jóvenes, por su parte, han estudiado mucho el medioambiente en clase, pero han tenido muy poco contacto con él, y creo que si tú quieres proteger el medio ambiente, tienes que saber qué quieres proteger. No sirve de nada que les enseñemos términos en la escuela si luego no saben reconocer un ave invasora, una cigüeña…

Tiene muy buena pinta el movimiento Friday’s for future. Pues sí, es esperanza. También veo cambios de prioridades que están muy bien entre las generaciones jóvenes. En la mía, los chicos estaban deseando ser mayores de edad para comprarse un coche. Ahora esto no pasa, y esa decisión tiene, entre otros, un componente medioambiental, perciben que es contaminante. Es un cambio de mentalidad que hay que aprovechar.

Usted define Aquí la Tierra como un programa sobre geografía. Sí. Hace cinco años nos encargaron un magazine de entretenimiento, y yo, haga lo que haga en medios de comunicación, siempre he pensado que ha de ser ameno. Así que planteamos difundir contenidos de geografía, meteorología y medio ambiente desde una perspectiva entretenida. Esa conclusión me la guardé en esas primeras conversaciones, porque pensé que no me iban a dejar ni salir de allí imaginando que se les venía encima un tostón (risas). Pero es verdad que Aquí la Tierra es el programa más geógrafo que se ha hecho en televisión en muchos años. Partimos del tiempo que hace para reflejar cómo éste nos condiciona. Por ejemplo, cómo los árboles están reaccionado al clima actual con floraciones adelantadas, cómo toda una agricultura varía en sus actividades por el clima, cómo hay oficios que se están perdiendo, conocemos recetas tradicionales...

¿Siempre ha querido ser 'Hombre del Tiempo'? De adolescente, quería ser periodista, y siempre he tenido pasión por el medio ambiente. Como no era muy buen estudiante, no me dio la nota para estudiar Periodismo, así que estudié Geografía por esa segunda fascinación que tenía, y más adelante, el trabajo de 'Hombre del tiempo' me ha permitido enlazar ambas cosas. Y aquí seguimos. Esto me está dando las mayores alegrías de mi vida.

De joven, ¿era fan de algún meteorólogo en concreto? Mi referente, como el de muchos, ha sido siempre un meteorólogo de TV3 que se llama Alfred Rodríguez Picó, una persona que hablaba del tiempo de una forma súper cercana, afable, que te hacía sonreír. Además, le gustaba mucho el arte, la pintura y la música clásica, y era capaz, en un espacio del Tiempo, de sacarte una composición de música clásica y relacionarla con la previsión de la semana. Ese paralelismo, ese ser capaz de mostrar cómo la vida cotidiana está condicionada por el clima, me parece muy bonito y todavía por explorar. Todos sabemos que nos condiciona la salud, la física y la mental. Pero aún hay mucho por descubrir.