Este mismo jueves, el DJ y cantante Kiko Rivera actuó en las denominadas fiestas del Ramo 2022, en el municipio extremeño de Casar de Cáceres, en un concierto que había generado mucha expectación entre los cacereños. El sevillano fue el encargado de dar el pistoletazo de salida a unas fiestas que llevaban paralizadas dos años por la pandemia y que estaban siendo muy esperadas por el público local.

El concierto estaba discurriendo con normalidad ante un público entregado que disfrutaba de las canciones del DJ, pero todo se torció en un momento concreto: cuando el artista le propinó una patada a un joven que se encontraba en el concierto. El golpe alcanzó al fan en la mano y en el cuello e hizo que su teléfono móvil saliese despedido. Los motivos que llevaron a Rivera a agredir al espectador se desconocen, ya que ni la víctima, ni los testigos ni el propio cantante se han pronunciado al respecto.

Estos hechos vuelven a convertir a Kiko Rivera en noticia tras su ya polémica vuelta de vacaciones, ya que su identidad en redes ha sido suplantada y un vecino asegura que le debe dinero. A ello, hay que sumar las palabras de su hermana, Isa Pantoja, al respecto: “Creo que al que le debe dinero es un paparazzi, mi hermano dice que se lo está inventando, tanto Irene como mi hermano han desmentido a este señor siempre”, sostenía. A su vez, al ser preguntada por su relación con su hermano, ha indicado: “No ha cambiado nada, ahora está actuando como él quiere, me está respetando, pero hay cosas en las que no puedo decirle nada malo. Ahora que me lo dices, me doy cuenta de que he cambiado un poco”, concluía, dando a entender que estaba más tranquila al respecto de ese tema.

Volviendo al concierto, las reacciones en redes sociales no se han hecho esperar. Hay quienes han mostrado su indignación ante las imágenes protagonizadas por el intérprete, otros han tirado de ingenio y otros han puesto el énfasis en el talento del sevillano.