"Un día triste para España... Blanca, que Dios te tenga en su gloria. No tuve el placer de conocerte pero si de admirarte. Que hoy mi música suba durante unos segundos al cielo y escuches mi dedicación en mi actuación en Ibiza. Descansa en Paz". Este fue el mensaje surrealista con el que el disc-jockey Kiko Rivera quiso despedirse de Blanca Fernandez Ochoa. Unas palabras que le valieron más de una critica. 

Tras esta última polémica, el hijo de Isabel Pantoja vuelve a Madrid después de unos días de vacaciones en Ibiza y Sevilla. Y precisamente en la capital hispalense ha protagonizado un sonado desencuentro con los medios de comunicación al ser preguntado por su relación con su hermana Isa Pantoja: "¡Que me dejes en paz ya!".