“Todo bien, gracias”, es la única respuesta de Albert Rivera sobre su presunto romance con la cantante Malú. Hasta ahora. El líder de Ciudadanos ha pasado por los micrófonos de la COPE donde Carlos Herrera le ha preguntando al respecto y Rivera ha preferido hablar de “España y los españoles”.

El locutor de la COPE preguntaba a Rivera sobre "las informaciones de los últimos días que tratan sobre su vida personal", en referencia a la portada de Semana que hablaba de que Rivera y Malú son “más que amigos” tras ser pillados en casa del político pasando la noche de San Valentín.

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Rivera ha señalado que tras diez años dedicándose a trabajar por España no va a perder “ni un minuto” en comentar su vida privada: "Lo importante son los españoles y cuando uno es persona pública tiene que aguantar esas cosas. Es mucho más importante España y los españoles, y yo hay algo que no haré nunca, que es entrar en la vida de los demás".

Hasta el momento, su única reacción conocida era la de “todo bien, gracias” que contestó a los periodistas a su llegada en AVE de Málaga, donde recibió un premio que su equipo de prensa puso al nivel del falso “Nobel Jurídico” que recibió el rey Felipe VI el día de antes.

Rivera ha respondido a la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, que no siente "ningún respeto" por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y que los escaños que obtenga su partido en las próximas elecciones generales servirán para favorecer un cambio en el Ejecutivo.

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"Para mí no merece ningún respeto una persona que ha sido capaz de pactar con los que quieren liquidar mi país", ha declarado cuando le han preguntado por la carta en la que Narbona lamenta que la Ejecutiva de Ciudadanos rechace un acuerdo postelectoral con el PSOE y le insta a recapacitar su postura.

Rivera ha defendido que los españoles deben saber antes de ir a votar el 28 de abril que "los escaños de Ciudadanos van a servir para formar un nuevo Gobierno, para un cambio".

Tras señalar que él se metió en política en Cataluña para que a un jefe del Ejecutivo "nunca se le ocurriera sentarse en la mesa con gente como (Quim) Torra", el presidente de la Generalitat de Cataluña, ha preguntado: "¿Cómo quiere que yo apoye a este señor?".