El partido que han disputado este lunes el Rayo Vallecano y el Albacete, correspondiente a la jornada 36 de la categoría de plata del fútbol español, ha contado con dos invitados que han sorprendido a propios y extraños: el presidente de Vox, Santiago Abascal, y la candidata de la formación ultra a las elecciones madrileñas, Rocío Monasterio.

Ambos han sido invitados por la directiva del Rayo -un equipo con una amplia tradición antifascista- y se han sentado junto al presidente del club madrileño, Raúl Martín Presa, en la zona reservada para entidades en el palco del Estadio de Vallecas. Una presencia especialmente destacable teniendo en cuenta que, al igual que ocurre en el resto de campos de primera y segunda división, la temporada entera está discurriendo sin aficionados por culpa de la pandemia de coronavirus.

La imagen de ambos dirigentes ultras en el palco del Estadio de Vallecas ha sido muy criticado en las redes sociales. En este sentido, uno de los comentarios más destacados ha sido el del periodista y aficionado del Rayo, Quique Peinado. “A ver a Zozulia”, ha tuiteado el copresentador de Buenismo bien.

Para contextualizar el mensaje de Peinado, hay que recordar que este mismo partido fue suspendido la temporada pasada, después de que una importante parte de la afición rayista insultara al delantero del Albacete y exjugador del Rayo, Roman Zozulya, al grito de “puto nazi” –un hecho que ha provocado que para el partido de este lunes se diseñara un despliegue policial importante para evitar posibles conflictos-.

De hecho, el Rayo se vio obligado a rescindirle el contrato al futbolista ucraniano ante las peticiones de la afición por sus vínculos con el nazismo.