El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, lo ha vuelto a hacer. Después de golpear a un niño y a un reportero gráfico sobre el campo, esta vez su víctima ha sido otro fotógrafo que trataba de capturar este jueves el momento en el que el dirigente municipal chutaba una pelota que acabó estrellándose contra él y propinándole un balonazo en la cámara que sostenía.

Ya hace más de dos años y medio, en febrero de 2020, Almeida, públicamente y por primera vez en su cargo, golpeó a un niño con una pelota durante la inauguración de un campo de fútbol en el barrio madrileño de Sanchinarro. El disparo rebotó en la cara del niño y acabó por entrar en la portería, un gol que todos los presentes, incluido él, celebraron sin preocuparse por el estado del menor.

Tras cobrarse su primera víctima, hace algo más de un año volvió a repetir una escena parecida. Almeida participó en junio de 2021 en un acto benéfico celebrado en el estadio del Atlético de Madrid, equipo de fútbol del que es seguidor, para apoyar la causa de su fundación en la lucha contra el cáncer y la investigación en este campo científico, pero el alcalde de la ciudad, tras patear un balón mediante la técnica de la rabona, acabó por estrellarlo de igual forma en la cara de uno de los reporteros gráficos que se disponían a inmortalizar aquel momento.

Almeida vuelve a propinar otro balonazo

Al menos, esta vez, acto seguido Almeida se acercó para pedir disculpas a su segunda víctima, aunque poco después publicó el vídeo del incidente. "Lo he vuelto a hacer", fue el texto con el que acompañó a las imágenes que el alcalde de Madrid subió a su cuenta oficial de Twitter en un intento por destacar este suceso con humor y sin pronunciarse sobre el anterior para ofrecer un perdón público al niño que fue su primera víctima.

Este jueves ha sido cuando su tercera víctima, un fotógrafo, ha recibido otro balonazo por parte de Almeida. Durante la inauguración de unas instalaciones de rugby en el barrio madrileño de Villa de Vallecas, el dirigente municipal ha chutado un balón que se ha estampado contra la cámara que sostenía uno de los reporteros gráficos que se encontraban cerca para capturar el momento.

En esta tercera ocasión, Almeida tampoco se ha acercado al afectado para pedirle disculpas o preocuparse por su estado. El disparo del alcalde de Madrid, al parecer, impactó en la cámara del fotógrafo y hasta ahora no se conoce si llegó a ocasionar daños tanto a él como a su herramienta de trabajo.