El terremoto que provocó el pasado viernes Kiko Rivera con las revelaciones sobre su madre, Isabel Pantoja, en el programa Cantora: la herencia envenenada, acerca de los supuestos engaños con el legado de su padre, Paquirri, mantuvo enganchados a uno de cada tres espectadores. Las réplicas se han seguido repitiendo en los espacios de Telecinco y El Programa de Ana Rosa no ha podido ser menos, aunque la presentadora ha preferido centrarse en el detalle del pendiente que llevaba Kiko Rivera: la anilla de una lata de refrescos. “Qué necesidad, pierde credibilidad”, señalaba Ana Rosa Quintana, que le ha exigido “que se la quite”.

Ana Rosa Quintana comentaba este lunes la entrevista que el viernes dio Kiko Rivera en el plató de Sálvame, en un programa especial llamado Cantora: la herencia envenenada, donde el hijo de Isabel Pantoja reveló, entre otras cosas, que encontró una habitación en la finca, cerrada a cal y canto, donde estaban todos los enseres de Paquirri que Pantoja siempre ha asegurado que fueron robados. Algo que ha provocado el malestar de los hijos del torero, Fran y Cayetano Rivera, que han salido en defensa de Fran Rivera.

Sin embargo, Ana Rosa Quintana ha señalado a un detalle que para la mayoría ha pasado desapercibido: “Una chapa de Coca-Cola aquí”, decía la presentadora, señalándose la oreja para llamar la atención del pendiente que llevaba el DJ. “No es una frivolidad, yo le veía y pensaba ‘qué necesidad, pierde credibilidad’”. “Lo digo para que se lo quite”, insistía la presentadora, a lo que su colaboradora, Patricia Pardo, añadía: “Nos ha quedado clarísimo”.

“Parecen frivolidades y tonterías, pero no lo son”; insistía Ana Rosa Quintana. “La imagen es importante”, señalaban los colaboradores en la mesa, “esa entrevista se va a ver dentro de 10 o 15 años y va a estar la chapa ahí”. “Es para quitarle un poco de hierro a todo esto, porque es durísimo para los dos”, añadía la presentadora de El Programa de Ana Rosa

Según la presentadora de El Programa de Ana Rosa, “no es la primera ni la última vez que una madre y un hijo se dicen cosas así”. “Cada uno tendrá su verdad y no sabemos quién tiene razón y se irá viendo poco a poco”, insistía Ana Rosa Quintana, “para ella los insultos como madre son tremendos, independientemente de cómo hayan sido las cosas”. 

Mientras, en la mesa de tertulia, Rocío Ramos-Paul, conocida como la presentadora de Supernanny, analizaba la situación entre Isabel Pantoja y Kiko Rivera: “Yo vi mucho dolor en la entrevista”. “”Hay una mala gestión del dolor que salió el otro día”, señalaba la psicóloga, “tienen que sentarse fuera de cámara y hablar en otros términos, da la impresión de que no han hablado mucho”.