Twitter ha muerto. Al menos el pajarito azul que ha sido su logo y que le ha representado desde hace 17 años, cuando la red social fue creada un 21 de marzo de 2006 en San Francisco, California (EEUU). Su actual dueño, el multimillonario Elon Musk, propietario de Tesla, anunció este domingo que Twitter cambiaría su marca y sustituiría al pajarito por una X, uno de los mayores cambios desde que comprase la red social por 44.000 millones de dólares el año pasado. Y este lunes, a partir de las 9:00 horas, muchos usuarios españoles ya han visto el cambio en sus terminales.
“Y pronto diremos adiós a la marca de Twitter y, poco a poco, a todos los pájaros”, dijo Elon Musk este domingo en su cuenta, en una serie de tuits en los que anunció que a partir de este lunes haría el cambio en todo el mundo.
La X, el nuevo logo de Twitter, en el perfil de Elon Musk.
El pajarito se convierte en X
El cambio de logo del pajarito por un logotipo con una X se produce justo cuando Twitter tiene un nuevo competidor, nacido en el universo Meta que engloba a Facebook, Instagram y Meta. Esta nueva red recibe el nombre de Threads y fue lanzada a principios de este mes con un funcionamiento similar a la red social de Elon Musk y como una alternativa para los usuarios descontentos con Twitter.
Thread ha aparecido como una alternativa a Twitter que funciona como la versión de texto de Instagram y es, según Meta, “un espacio nuevo y separado para actualizaciones en tiempo real y conversaciones públicas”. De momento, en pocos días funcionando, Threads ya acumula 100 millones de usuarios, según fuentes de Meta.
Con la X a vueltas
La llegada de la X tiene un origen que se remonta al año 2007, cuando Elon Musk compró el dominió X.com en 2007. Una inversión misteriosa que no se convirtió en nada, hasta la compra de Twitter, cuando el magnate aseguró que dicha inversión era "un acelerador para la creación de X, la aplicación para todo". Otro paso más llegó en abril, cuando el nombre social de la red cambió y dejó de ser Twitter Inc. y pasó a llamarse X Corp. En sus mensajes de este fin de semana, Musk incluía ya el nuevo diseño y pasaba a cambiarse su imagen de perfil personal por el nuevo logo.
— Elon Musk (@elonmusk) July 23, 2023
Esta noche, la sede central de la compañía también proyectaba en su fachada la X que es el nuevo logo de Twitter y Elon Musk publicaba, además de esa fotografía, un tuit con una única letra: 𝕏. El nuevo logotipo recuerda mucho -es casi una versión en color negativo- al logo de Space X, la compañía de tecnología espacial de Musk.
En declaraciones a Reuteres, Mike Proulx, director de investigaciones de la consultora de marketing Forrester, señalaba que el cambio podría alejar a su base de usuarios, antes muy fieles a la marca. "Por una parte, podrías creer que se está deshaciendo de una marca icónica. Por el otro lado, está anunciando que es un nuevo día para lo que en su día fue Twitter y que la compañía se dirige en una dirección diferente con unos usuarios diferentes".
Cambios polémicos en Twitter
Este es uno más de los cambios que Musk ha impuesto en la red social en el último mes, que le han valido un alto número de críticas. Uno de los que más conmoción causó fue el límite de tuits que algunas cuentas podían leer y que muchos usuarios descubrieron con un mensaje que les avisaba de que habían alcanzado el máximo de tuits disponibles. Este cambio fue provocado para intentar frenar el proceso de las inteligencias artificiales, que usaban Twitter como una fuente de información con la que alimentar sus bases de datos de lenguaje.
Este umbral máximo de visualización de tuits puede ser esquivado pagando la suscripción mensual de 8 dólares, otra de las innovaciones polémicas de Musk, lanzada a principios de año para aumentar los ingresos de Twitter. Las cuentas de la compañía han caído en picado desde que Musk se hizo cargo de la empresa y despidiese a tres cuartas partes de los empleados para reducir costes y evitar la quiebra.
Otro de los problemas de Twitter es el abandono masivo de anunciantes, que salieron de la red social con la llegada de Musk y su política más abierta que ha permitido la reaparición de contenido de odio. Muchas marcas salieron de Twitter por miedo a que las polémicas y el caos de gestión afectase a su imagen.
