El sector aeroespacial español está que arde. Si la semana pasada les contábamos la historia de la mini cámara enviada por Satlantis a la Estación Espacial Internacional, hoy les traemos otra prueba de que en el espacio se habla español.

Se trata del proyecto Promise, liderado por Thales Alenia Space en España, que se centra en una tecnología conocida en el sector como ASIC [circuitos integrados de señal mixta]. “Hemos combinado, dentro de un mismo chip, parte analógica y parte digital. Es decir, tenemos por un lado el cerebro, el procesador digital como podría tener cualquier ordenador; pero además, tenemos funciones analógicas que permiten adquirir información y actuar sobre el exterior: medir tensión y temperatura, generar una señal que controle un motor o que active un relé”, explica Ángel Álvaro, responsable de I+D de Thales Alenia Space en España.

Promise que permitirá construir satélites más pequeños y baratos

Promise que permitirá construir satélites más pequeños y barato

Más pequeño y más barato

Promise permite reducir el tamaño de los equipos. Y, además, el desarrollo de este tipo de circuitos supone tener que empezar desde cero cada vez: decidir qué funciones se necesitan y diseñarlas una a una, transistor a transistor. Esto genera unos costes muy altos y unos plazos de desarrollo muy largos.

La Comisión Europea, junto con la Agencia Espacial Europea, la ha incluido entre las denominadas tecnologías para no dependencia. “Son tecnologías que a día de hoy se están adquiriendo en el extranjero, principalmente en Estados Unidos, porque no hay un equivalente en Europa”, explica Álvaro. Por eso forma parte de del programa de Investigación e Innovación Horizonte 2020.

Vamos a crear tecnología europea y además vamos a generar una librería de bloques ya desarrollados y listos para integrar

Beneficios

“Promise incide en dos aspectos. Por una parte, vamos a crear tecnología europea y además vamos a generar una librería de bloques ya desarrollados y listos para integrar. Además, validados y probados por una empresa como la nuestra, que sabe lo que hace falta para funcionar en el espacio”. Por tanto, cuando termine este proyecto, “cualquier compañía espacial europea que necesite desarrollar un ASIC de señal mixta, en lugar de empezar desde cero, podrá venir a nuestra librería y coger los bloques necesarios”.

Algo especialmente importante, sobre todo, para “empresas medianas y pequeñas para las que esta tecnología no es accesible”, explica Álvaro.

Pero, por supuesto, también los ciudadanos de a pie nos beneficiaremos. “Estos chips van a permitir fabricar satélites cada vez más pequeños y más baratos en Europa. Eso supone poder ofrecer nuevos servicios como 5G por satélite, lo que significa cobertura global, sin que el usuario note el cambio. Tanto por razones económicas como geopolíticas de control de la privacidad y demás es mejor que ese servicio se preste a través de satélites europeos”.

Estos chips van a permitir fabricar satélites cada vez más pequeños y más baratos en Europa

Éxitos

Promise es uno más de los proyectos que Thales Alenia Space ha realizado para diferentes misiones espaciales. “Solo en España llevamos 30 años”, explica Álvaro, que lleva 25 en la compañía “trabajando en proyectos espaciales desde el primer día”. Acaban de entregar el equipo que controla los motores del Rover ExoMars. “Todo el control de movimientos de ese Rover lo hace un equipo que hemos desarrollado y fabricado en España”.

La lista de éxitos desarrollados desde las instalaciones de la compañía en Tres Cantos [Madrid] es impresionante. Desde transpondedores para la NASA, hasta el sistema de comunicación de la Estación Espacial Internacional [ISS]. “Cualquier módulo que se acerque a menos de 40 kilómetros se tiene que comunicar con ella a través de un enlace de radio que hemos diseñado nosotros”. De hecho, el receptor instalado en la ISS también es obra de Thales Alenia Space en España.

Según Álvaro, la iniciativa tiene complicaciones pero su compañía cuenta con la experiencia como aliada, además de con buenos compañeros de viaje a los que conocen bien. “Los proyectos que funcionan son los que tienen socios distintos que hacen actividades distintas pero que juntas se encauzan a un objetivo común. Así evitas problemas de competencia interna y consigues que todo el mundo esté alineado”.

Universidad

Podría parecer que contar con las personas con el perfil idóneo es complicado. “Encontrar el talento necesario no es difícil. En España nos sobra talento. Los estudiantes salen con igual o mejor preparación que de cualquier universidad europea. Hay que saber buscarlo, pero está ahí”.

Álvaro sabe bien de qué habla, porque también es profesor asociado en la Universidad Rey Juan Carlos. Su asignatura es Comunicaciones por Satélite y Navegación en la facultad de Ingeniería de las Telecomunicaciones. “A mis alumnos siempre les digo lo mismo: sigue, busca, infórmate, porque si quieres trabajar en el sector espacial, vas a trabajar en el sector espacial. Lo vas a conseguir, porque en España hay unos doce mil puestos de trabajo en la industria espacial y en Europa un cuarto de millón. Hay un montón de salidas. No es inmediato, hay que esforzarse y trabajarlo, pero  es posible”.

Y asegura que nuestro país es un excelente lugar para este campo. “En el plano técnico, la industria espacial europea y, en concreto la española, están al primer nivel”.