Lo que parecía que iba a ser una situación coyuntural provocada por la pandemia de Covid-19, ya es considerada por amplios sectores del mundo económico y financiero como un cambio permanente. Y eso provoca que la forma de emprender en estos tiempos tenga que cambiar.

Carolyn Dewar, Scott Keller y Vikram Malhotra han llevado a cabo entrevistas en profundidad a 67 CEOs de las empresas con mejores resultados en los últimos años y, con las conclusiones de esas conversaciones, han publicado el libro CEO Excellence: The Six Mindsets That Distinguish the Best Leaders from the Rest [La excelencia en CEOs: las seis mentalidades que diferencian a los mejores líderes del resto]. De sus conclusiones, hemos extraído cinco claves por si estás emprendiendo o tienes en la cabeza hacerlo.

Es preciso ajustar los productos y servicios con rapidez a las nuevas realidades

1.- [Re]diseña tu oferta para maximizar el valor y la disponibilidad.

“Las elecciones de diseño para los productos y servicios son críticas para responder a la volatilidad de las materias primas, la escasez de componentes y los mayores costes de producción y mantenimiento, a la vez que se mantiene la funcionalidad que los clientes requieren”, señalan.

Por eso, es preciso “rediseñar los productos y servicios con rapidez para ajustarlos a las nuevas realidades”. Además, es preciso simplificarlos para adaptarlos a las especificaciones y regulaciones de diferentes países y continentes, en lugar de tener que adaptarlos a cada caso.

Por otra parte, con el fin de compensar el incremento de los costes de transporte, el rediseño tiene que incluir también el packaging.

Es necesario visibilizar toda la cadena de suministro para evitar riesgos

2.- Crea una cadena de suministro integrada, transparente y ágil.

“Mucho antes de la invasión de Ucrania en febrero de 2022, los nuevos regímenes de tarifas y el incremento en los costes de transporte marítimo y terrestre que emergieron durante la pandemia, han puesto en tela de juicio la forma de pensar de la vieja escuela que consideraba que la optimización de costes es el objetivo principal de las cadenas de suministro”, indica este equipo investigador.

Para cambiar esa visión, es necesario visibilizar toda la cadena, algo que es importante porque las mayores presiones como consecuencia de la carestía de productos como los semiconductores, se producen en los niveles más profundos de la cadena de suministro, por lo que es preciso comprenderla en su totalidad.

Solo de esa forma, se pueden anticipar los riesgos procedentes de vulnerabilidades procedentes de la concentración de proveedores en una misma zona, por ejemplo.

El modelo de compras debe poner en contacto a todas las áreas de la organización

3.- Transforma tu modelo de compras para que genere valor y no solo ahorro de costes.

Para conseguirlo, es necesario “expandir tu foco” para tener en cuenta que “todo está en juego”. El modelo de compras debe poner en contacto a todas las áreas de la organización, para maximizar la demanda y simplificar los requerimientos y así evitar las presiones inflacionarias.

También es preciso que tengas en cuenta o pongas al día los contratos en base a la realidad actual y repensar la logística y la procedencia de los materiales o componentes. Esta reflexión está provocando que muchas compañías [sobre todo en Estados Unidos] estén buscando en América y otras regiones para reducir la dependencia de Asia.

Otro aspecto importante es la inversión en tecnología y en la automatización.

Hay que fomentar el sentimiento de inclusión, seguridad psicológica y comunidad

4.- Ten en cuenta el nuevo terreno de juego del talento.

Para conseguir el mejor talento y retener a las personas que más valor aportan a la organización, es preciso ir más allá del salario y los beneficios: “Para atraer y retener a los empleados desencantados, las empresas no pueden limitarse a escribir un cheque grande tras otro y esperar que eso funcione. Los líderes deben prestar atención constante de forma simultánea a la retribución y a los factores culturales”.

Sin embargo, este equipo de investigación reconoce que “no hay una forma correcta de reinventar la retribución, hay que utilizar algo el ensayo y error”. La clave está en “pensar cómo puede tu compañía ayudar a los empleados a encontrar el sentido de propósito y pertenencia que pueden hacerla más atractiva para incorporarse e, idealmente, quedarse”.

Para conseguirlo, hay que fomentar el sentimiento de inclusión, seguridad psicológica y comunidad.

Quienes pueden jugar un papel fundamental son los profesionales “no tradicionales” y “latentes”, más allá de quienes cuentan con un título universitario: “estudiantes, trabajadores a tiempo parcial, startups unipersonales y gente que no está buscando activamente un trabajo tradicional en una empresa tradicional, pero puede estar interesada en determinados trabajos con las condiciones adecuadas”.

5.- Fija precios que refuercen las relaciones con los clientes.

“En entornos inflacionarios, una pregunta fundamental es: ¿qué hacer con los precios?”. La respuesta no parece ser subirlos para mantener los márgenes, “es típicamente desagradable para las empresas y peor para los clientes”.

Pero, pese a lo que pueda parecer, esta situación supone “una oportunidad para replantear las relaciones con los clientes de forma estratégica para generar relaciones más profundas con ellos”.

Las palancas que se pueden pulsar van desde utilizar la tecnología y el análisis de datos, hasta comunicar tu oferta de valor de forma más eficaz.