Las malas previsiones de cara al otoño que ya acecha ha llevado a la Unión Europea a contemplar un extenso plan ante la crisis de energía y las amenazas de Rusia de cortar el suministro de gas a los 27. De esta forma, las autoridades europeas parecen seguir la estela del Gobierno dirigido por Pedro Sánchez, y es que España se ha colocado como referente estratégico en materia de energía debido a su celeridad y anticipación en la asunción de medidas de ahorro energético.

Así, el Consejo de la UE ha mandado una circular a los gobiernos europeos en los que recoge una serie de iniciativas posibles para hacer frente a la falta de electricidad o gas que previsiblemente se producirá en el último trimestre del año tras el órdago de Rusia. Una decisión que se suma a la Comisión Europea, que hace una semana anunció sendas propuestas para intervenir el mercado eléctrico, tal y como comunicó su presidenta Ursula von der Leyen, y que se estudiará en la reunión que van a mantener este viernes en Bruselas los ministros de Energía de los países miembros.

"Es fundamental hacer un balance de la evolución en los mercados e identificar posibles medidas para abordar los altos precios de la electricidad derivados de los altos precios del gas", defiende el texto remitido el pasado viernes, después de que Gazprom -la mayor compañía de gas de Rusia- anunciara otro cierre del gasoducto NordStream 1 por presuntas razones técnicas.

Esto parece haber hecho saltar las alarmas europeas, que ven cómo los precios del gas han subido más del 30% tras esta decisión. "Los altos precios de la energía y la volatilidad están alimentando el aumento de la inflación y tienen graves impactos en todas las empresas y consumidores, incluidos los más vulnerables, las víctimas de la pobreza energética y, cada vez más, los hogares de ingresos medios", insiste el documento.

Por eso, el Gobierno de la República Checa -que actualmente dirige el Consejo de la UE por rotación- ha elaborado una lista con algunas iniciativas que se pueden llevar a cabo de manera conjunta para hacer frente a esta situación, que se espera complicada. "Está claro que la próxima temporada de calefacción pondrá a prueba la resiliencia del mercado energético de la UE", aseguran en el texto, en el que apuntan a los problemas de "liquidez", las "fluctuaciones diarias de precios" y los "bajos niveles de participación en los mercados de futuros".

Las "opciones consideradas" por el CE

1. "Desvincular/limitar el impacto del precio del gas sobre el precio de la electricidad"

En la misiva, el Ejecutivo checo propone en primer lugar "desvincular/limitar el impacto del precio del gas sobre el precio de la electricidad", un extremo que ya forma parte de la reforma del mercado planteada por Bruselas. Dentro de esta idea, destacan la posibilidad de "limitar temporalmente" el precio del gas utilizado para la producción de electricidad así como el gas importado de jurisdicciones específicas (en referencia a Rusia) así como excluir temporalmente la producción de electricidad a partir de gas de la orden de mérito y fijación de precios en el mercado de la electricidad. Esta es una variable de la excepción ibérica, aprobada para España y Portugal.

2. "Aumentar la liquidez en el mercado"

En segundo lugar, esta institución plantea "aumentar la liquidez en el mercado" a través de tres puntos: líneas de crédito inmediato para los participantes del mercado que experimenten margin calls muy altas, es decir, poder pedir nuevas garantías cuando estas no son suficientes; poder modificar las reglas de negociación en los intercambios de energía, como cambiar temporalmente los requisitos reglamentarios para las garantías en el comercio de electricidad, así como suspender de forma temporal los mercados de derivados de energía europeos o sostener la negociación de futuros a bandas específicas.

3. "Medidas coordinadas de reducción de la demanda de energía eléctrica"

La tercera idea son "medidas coordinadas de reducción de la demanda de energía eléctrica". En este sentido, habla de reducir la demanda en el sector eléctrico, por ejemplo, "similares a las medidas coordinadas de reducción de la demanda en el sector del gas adoptadas en julio de 2022" para lograr reducir el consumo de gas en la UE en un 15%, en línea con el objetivo que ya fijaron hace meses.

4. "Limitar los ingresos de los productores de electricidad inframarginales"

También se contempla "limitar los ingresos de los productores de electricidad inframarginales" a través de limitar temporalmente el precio de la electricidad que ganan los generadores inframarginales", los conocidos como beneficios caídos del cielo.

5. "Impacto del sistema EU ETS"

En quinto lugar, el documento también hace una mención al impacto del régimen de Comercio de Derechos de Emisión de la Unión Europea, conocido como sistema EU ETS. Por ello, propone “evaluar las opciones de cómo hacer uso del EU ETS para abordar los altos precios de la electricidad actuales y garantizar que el Consejo avance rápidamente hacia el acuerdo sobre los capítulos REPowerEU en los Planes de Recuperación y Resiliencia (RRF), incluyendo la posibilidad de utilizar derechos de emisión de la Reserva de Estabilidad del Mercado".

Siempre bajo seis principios básicos

Con todo, el Gobierno checo asegura que estas iniciativas "deben observarse en cualquier intervención futura relevante" y apunta a seis principios básicos. Según sus explicaciones, estos deben preservar la seguridad del suministro de electricidad y gas a nivel europeo así como el mercado interior de la energía y los beneficios relacionados. También no deben conducir a un incremento del consumo de gas, ni deben poner en peligro los esfuerzos para reducir el consumo de gas en Europa. Asimismo, defienden que la respuesta ha de ser sencilla de aplicar y estar coordinada en toda la UE, deben aliviar el impacto en las facturas de energía de los consumidores y tienen que tener coherencia con los objetivos y la implementación del Pacto Verde Europeo.

A pesar de tratarse de una lista de iniciativas para hacer frente a la crisis derivada de la invasión de Ucrania por parte de Rusia -y tras el apoyo europeo mayoritario al gobierno de Volodímir Zelenski-, la institución europea deja la puerta abierta a una reforma total del mercado eléctrico de cara a que se produzcan "condiciones de mercado similares en el futuro". "Dicha actualización debe considerarse adecuadamente, basarse en un análisis exhaustivo y una evaluación de impacto y tener en cuenta la implementación progresiva de un futuro mercado de energía descarbonizado", afirman.

Estos enunciados serán evaluados y discutidos por los ministros de Energía, que este viernes 9 de septiembre tienen previsto reunirse en Bruselas. Por ello, la Comisión ha terminado el documento lanzando varias preguntas a los Estados miembros. "¿Está de acuerdo en que es necesario que la Comisión proponga medidas a escala de la UE que se adopten a tiempo para la próxima temporada de calefacción?", cuestionan y dejan la puerta abierta a que señalen por cuáles de las opciones apuestan. También les cuestionan qué tipo de instrumentos específicos consideraría apropiados para lograr "una pronta resolución de los problemas antes mencionados".