"No creo que España necesite ningún tipo de ayuda financiera", ha afirmado Strauss-Kahn, tras explicar que el FMI nunca se implica en un país si éste no se lo pide y en el caso de España, ha dicho, ni el Gobierno ha pedido ayuda ni él cree que la necesite.

"Políticas correctas"
Strauss-Kahn considera que “las políticas que ha puesto en marcha el Gobierno español, tanto en el aspecto fiscal como en el de reforma de pensiones, del mercado laboral o la bancaria, son las políticas correctas”.

Critica que se ha puesto a España en el mismo saco que a Grecia
El responsable del FMI ha criticado que “durante los últimos meses se ha puesto a España en el mismo saco que a otros países, como Grecia, cuando claramente no están en la misma situación”, ha afirmado.

Los mercados responden
Strauss-Kahn ha confirmado que los mercados “están respondiendo” tras las “adecuadas” medidas del Ejecutivo. “Es difícil para el país y para el Gobierno hacer lo correcto, pero lo están haciendo”, ha insistido.

Portugal, con alfileres
Preguntado por la situación de Portugal, el director gerente del FMI no se manifiesta de manera tan optimista. “El escenario en Portugal no es tan fácil como el de España”, dice, antes de explicar que “dependerá de cómo se desarrolle la situación del mercado en Portugal, si necesitan pedir prestado o no. Hasta ahora han sido capaces de manejarse”.

En la eurozona falta un piloto que la lleve a la dirección adecuada
Dominique Strauss-Kahn ha sido crítico con la forma en que se está gobernando la Unión Europea. En su opinión, la eurozona carece de “falta de instrumentos de gobierno colectivo. No se trata solo de un problema de qué políticas rigen ahora –aclara-, sino del liderazgo en Europa. Todos los países de la eurozona tienen un problema de eso, de liderazgo. Según el responsable del FMI, la administración europea “funcionó muy bien en tiempos de calma, pero obviamente está funcionando mal en esta tormenta”. Cree que es una opinión que comparten los mercados, los sindicatos, los empresarios y los ciudadanos de a pie. “Muchos dudan de que haya un piloto que esté llevando a la eurozona en la dirección adecuada”, concluye.