El Gobierno de España repartirá 68 millones de euros de los Presupuestos Generales del Estado a las comunidades autónomas. Este dinero se empleará en ampliar las prestaciones de salud bucodental en la sanidad pública. Así lo ha indicado la ministra de Sanidad, Mónica García, a través de su cuenta en la red social X, anteriormente conocida como Twitter. Este anuncio se hace tras la aprobación por parte del Consejo Interterritorial del Sistema nacional de Salud. 

Desde la puesta en marcha del plan de salud bucodental en el año 2022, las distintas regiones de España han dispuesto de una inversión total de unos 112 millones de euros. Así, en el año 2022 se destinaron 44 millones de euros, a los que se sumaron 68 millones al año siguiente.

Tal y como adelantamos en este medio, la ministra declaró en mayo que el Gobierno de España quería incluir la salud bucodental en el sistema de salud. Asimismo, destacó que esta inclusión en la cartera de servicios sería progresiva, con lo que buscaba beneficiar primero aquellas familias a las que "supone un gasto que desbarajusta su economía". 

Qué es el plan de salud bucodental del Ministerio

El plan de salud bucodental es una de las medidas que realizó el Ejecutivo en la legislatura pasada para ampliar la cartera de servicios que ofrece la sanidad pública. Así, los principales objetivos de este es, por una parte, homogeneizar las prestaciones de atención bucodental en el territorio nacional. Y por otra, incrementar los servicios, priorizando a determinados colectivos, como las embarazadas o pacientes con cáncer de cabeza y cuello. Así, la ampliación  de servicios tiene un enfoque "fundamentalmente preventivo". 

Este plan se basa en el plan de la Asamblea Mundial de la Salud para los años 2023 al 2030. Esta iniciativa proponía cien medidas a los Estados miembros con el objetivo de que el 80% de la población mundial reciba servicios esenciales de atención bucodental para el año 2030. Así, formarían parte de las prestaciones de de la cobertura sanitaria universal. 

Tal y como figura en el documento de la Asamblea Mundial de la Salud, algunas de los medidas son la reducción de la amalgama dental, el fortalecimiento de la preparación y respuesta frente a emergencias sanitarias o armonizar las actividades con las prioridades de salud  pública mundiales y nacionales. También la optimización de fluoruros para este tipo de salud y abogar porque el dentrífico fluorado sea considerado un producto sanitario especial, entre otros.