Telefónica ha convocado este viernes a sus accionistas a una junta general ordinaria en la que prevé la reelección de consejeros como Isidro Fainé, presidente de CriteriaCaixa y uno de los grandes directivos del núcleo duro de la teleco. De hecho, Fainé será uno de los protagonistas de la reunión anual de accionistas de la teleco este viernes ya que pasará de representar a CaixaBank a hacerlo en nombre de CriteriaCaixa. Sin embargo, el protagonista indirecto de la junta ordinaria de Telefónica será el Estado, concretamente la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), a la espera de que continúe con su plan para hacerse con hasta el 10% del capital de la compañía liderada por José María Álvarez-Pallete. 

El ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, confirmaba hace unos días que el Estado pedirá un asiento en el consejo de administración de Telefónica a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). Es decir, el Ejecutivo pedirá tener voz y voto en las decisiones tomadas en el máximo órgano de control de Telefónica. Sin embargo, el orden del día de la junta está cerrado desde hace semanas y, por lo tanto, el consejero representante del Gobierno no podrá ser propuesto a votación este viernes, al menos de momento. 

Cuerpo ha confirmado en una entrevista en Al Rojo Vivo la intención del Gobierno de contar con un puesto en el consejo de administración de la compañía tras la apuesta inversora de la SEPI sobre Telefónica. La SEPI ha adquirido ya oficialmente el 3% del capital de Telefónica y, tal y como ha confirmado el propio organismo inversor del Estado, mantiene su intención de hacerse con hasta el 10% ordenado a finales de diciembre de 2023 por el Consejo de Ministros. De hecho, la SEPI ya tendría comprometido otro 2% para hacerse con un 5% de Telefónica, la mitad de ese 10% anunciado. Este 10% fue marcado por el Gobierno como objetivo para superar el 9,9% que pretende controlar Saudi Telecom Company (STC), dependiente del fondo soberano de Arabia Saudí, sobre el capital de la teleco liderada por José María Álvarez-Pallete. 

El Ejecutivo ha reiterado en todo momento su compromiso para mantener la "españolidad" de Telefónica como empresa estratégica para la sociedad. No solo a través de la prestación de sus servicios de tecnología móvil o de internet, sino también como operador clave en contratos de defensa y ciberseguridad, un aspecto que deja más que clara la posición del Gobierno frente a la entrada de capital saudí en una de las empresas líderes del sector de telecomunicaciones, por el momento solo superada por la compañía resultante de la fusión entre Orange y MásMóvil, MASORANGE. 

Además de contar con un amplio porcentaje de acciones de la compañía, el Estado quiere dar "estabilidad accionarial" a Telefónica como inversor a largo plazo en el capital. Para ello, contempla entre sus planes pedir un asiento en el consejo, el máximo órgano de control de una cotizada, tal y como ha confirmado Cuerpo hace unos días. Sin embargo, el nombramiento del representante estatal -que Cuerpo ha asegurado no ser de su competencia- no podrá entrar a formar parte del consejo de Telefónica en las próximas semanas. Ni siquiera podrá ser nombrado este viernes. 

El consejero del Estado no puede ser nombrado el viernes 

La convocatoria de la junta ordinaria de accionistas de la compañía para este viernes, en segunda convocatoria, está publicada en su página web desde el pasado 8 de marzo. El orden del día está cerrado, con el punto clave marcado precisamente en las reelecciones de consejeros ya presentes en el consejo de administración. Los accionistas más representativos de la compañía, con más de un 3% de capital, solo habrían podido incluir nuevas propuestas en los cinco días siguientes a la publicación de dicha convocatoria, formalizada el pasado 8 de marzo por los canales habituales, hace casi un mes. 

Por este motivo -y cumpliendo los plazos legales de la celebración de la junta ordinaria de Telefónica- el Estado no podrá proponer a su consejero, o consejera, de la SEPI para representar al inversor público en lo más alto de la compañía. De producirse finalmente esta solicitud de asiento en el consejo de Telefónica, al lado del propio Pallete o del vicepresidente del consejo, Isidro Fainé, el Gobierno pasaría a estar representado en el órgano de control siempre que los accionistas de la compañía dieran su visto bueno a la entrada de capital público de nuevo en el accionariado de la cotizada. Pero esto no ocurrirá este viernes. 

Para ello habría que reunir de nuevo a los accionistas -Telefónica apuesta por hacerlo este viernes de forma online- ya sea en una junta extraordinaria, convocada a lo largo de este año, o bien, esperar a la celebración de la próxima junta ordinaria el año que viene por las mismas fechas. Es decir, de no celebrarse un evento extraordinario en el que dar la entrada al consejero en representación de la SEPI en el capital de Telefónica, el representante nombrado por el Gobierno -en última instancia por el Ministerio de Hacienda y la propia SEPI- no podría tener ni voz ni voto en el accionariado hasta abril de 2025.

Lo que sí se espera, más allá del orden del día habitual de un evento como este, es que el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, ofrezca algún detalle más sobre los planes de futuro de la teleco, así como la intención del Estado de continuar aumentando su participación en el capital de teleco con hasta un 10% o bien, de la entrada de capital saudí en el accionariado de la compañía a través de Saudi Telecom Company. 

Fainé, protagonista de la junta de Telefónica

El punto clave del orden del día pasa precisamente por la reelección de consejeros claves para la compañía como Isidro Fainé, en su caso como consejero dominical, y de José Javier Echenique, Peter Löscher, Verónica María Pascual y Claudia Sender como consejeros independientes. Asimismo, los accionistas de la compañía deberán también dar el visto bueno a la ratificación y nombramiento de Solange Sobral y Alejandro Reynal, ambos también como independientes, tal y como consta en el cuarto punto del orden del día. 

La reelección de Fainé es uno de los puntos clave del orden del día de la junta y es que, según ha comunicado el holding inversor CriteriaCaixa en los últimos días, el presidente de Criteria y vicepresidente del consejo de Telefónica pasará de representar a CaixaBank en el accionariado de la teleco a hacerlo en nombre de Criteria. En los días previos a la celebración de la reunión anual de accionistas CriteriaCaixa ha aumentado -casi duplicado- su participación en el accionariado, con un porcentaje que supera ya el 5% de Telefónica. En concreto, el holding de Fundación “la Caixa” tiene ahora un 5,007% del capital de la teleco, casi el doble del 2,69% que tenía en participaciones directas hasta ahora. 

Más allá del punto de nombramientos, el resto de la convocatoria de la junta de accionistas pasa por la ratificación de las cuentas financieras presentadas por la compañía al cierre de 2023 y la gestión del consejo. Asimismo, los accionistas tendrán que dar el visto bueno a la retribución en dividendo que recibirán con cargo a las reservas de libre disposición. Finalmente, los últimos puntos del día de la junta someterán a votación la aprobación de un Plan de Incentivo a Largo Plazo consistente en la entrega de acciones de Telefónica destinada a directivos del grupo, así como la votación consultiva del Informe Anual 2023 sobre las remuneraciones de los consejeros de la compañía.

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