La holandesa Ferrovial ha conseguido finalmente el visto bueno para desembarcar en Wall Street. A última hora del viernes, alrededor de las 23 horas (hora española), la multinacional holandesa comunicaba haber terminado el proceso de revisión por parte de la SEC, el regulador bursátil estadounidense, para poder cotizar en el Nasdaq a partir de esta semana. Si todo va según lo previsto, Ferrovial empezará a cotizar este jueves 9 de mayo en Wall Street mientras, en paralelo, se enfrenta a problemas laborales en otro de sus mercados clave: Reino Unido.

Ferrovial cuenta entre sus activos internacionales con una importante participación en el principal aeropuerto británico, el de Heathrow, el 25%, al menos según las cifras actualizadas hasta enero de 2024. El aeropuerto londinense es un espacio clave para el transporte internacional y esta semana se enfrenta a una huelga de trabajadores. El principal sindicato británico, Unite, ha convocado parones en el aeropuerto de Londres-Heathrow para esta semana, coincidiendo con el desembarco de la compañía holandesa de los Del Pino en Wall Street, al otro lado del Atlántico, prevista para este jueves. 

La huelga en el aeropuerto de Heathrow estaba convocada a partir de este martes 7 de mayo para alrededor de 800 trabajadores. Por el momento se han cancelado las dos primeras jornadas de huelga pero no a partir del jueves. La convocatoria de huelga para el jueves, viernes y el fin de semana se mantiene en el aeropuerto de Heathrow, donde Ferrovial tiene un importante porcentaje de participación. De mantenerse sin cambios, el primer día de huelga de los trabajadores de Heathrow coincidiría con el desembarco de la holandesa en Wall Street. Un desembarco que va con retraso -el plan era hacerlo en el primer trimestre del año, antes del 31 de marzo- y que podrían empañar los problemas con la plantilla del aeropuerto londinense.

El sindicato Unite ha convocado varias jornadas de huelga en el aeropuerto de Heathrow por la subcontratación de funciones. Como parte de un ejercicio de reducción de costes, el aeropuerto londinense anunció su intención de subcontratar algunas funciones en el aeródromo a partir del próximo mes de junio. En concreto, las áreas del aeropuerto afectadas por esta decisión serán las plantillas de los servicios de pasajeros, las operaciones de carritos y ciertas funciones de seguridad. Por el momento, han llegado a un acuerdo para desconvocar la huelga durante el martes y el miércoles y se emplazan a mantener las negociaciones para evitar los parones de jueves a domingo.

"La decisión de subcontratar a los guardias de seguridad del campus supone un cambio radical con respecto al acuerdo alcanzado con Unite el verano pasado, cuando, como parte del acuerdo para poner fin a la huelga, la empresa aceptó iniciar el proceso para contratar internamente a todos los guardias de seguridad", denuncia el sindicato convocante. Unite reitera también la “increíble salud financiera” de la empresa responsable del aeropuerto, con unos beneficios de 701 millones de libras antes de impuestos al cierre del ejercicio 2023, “por encima de lo que ganaba antes de la pandemia”, critica el sindicato. "Está obteniendo enormes beneficios para los jefes mientras trata de exprimir hasta el último centavo de su fuerza de trabajo", ha denunciado la secretaria general de Unite, Sharon Graham.

La huelga en Heathrow coincide con el desembarco en Wall Street 

Mientras Heathrow -donde Ferrovial tiene una cuarta parte del capital- vive una semana de huelgas por su intención de subcontratar trabajadores, la multinacional de los Del Pino se centra en su desembarco en Wall Street. Un estreno en el mayor mercado bursátil del mundo que tendría que haberse producido en el primer trimestre del año. Al menos así lo contemplaba la multinacional en sus planes presentados a los accionistas en la que fue la última junta de accionistas de la compañía celebrada en España el pasado 13 de abril de 2023. La propia multinacional reconocía en el mes de marzo que no iba a poder cumplir con sus planes de desembarco al otro lado del Atlántico a pesar de que este era el objetivo principal de su marcha de España.

Ferrovial explicó y argumentó en todo momento que su fuga de España respondía al objetivo de llegar a cotizar a Wall Street. No obstante, defendía que para ello era necesario pasar previamente por Países Bajos, un paso que motivó el cambio de sede social de su Madrid natal a Ámsterdam. O al menos así constaba sobre el papel. La holandesa mantenía la vista puesta en Wall Street en su argumentario y aseguraba que el cambio de sede a Ámsterdam era simplemente un “paso intermedio”. Autoridades como la embajadora de Estados Unidos en España o el presidente de la Comisión Nacional de los Mercados de Valores (CNMV) le recordaron que podía cotizar en Wall Street desde Madrid, que no hacía falta hacer las maletas y mudarse. Pero Ferrovial hizo oídos sordos y mantuvo su plan de mudanza a Países Bajos, desde donde opera -y también cotiza- desde abril de 2023.

Ahora, poco más de un año después, la multinacional de los Del Pino está a punto de cumplir la triple cotización bursátil en Estados Unidos, Países Bajos y España. Ese objetivo que se marcó en sus planes de fuga y que sobre el papel era la principal, y una de las únicas, motivaciones para llevarse la sede social fuera de España. No obstante, lo hace fuera de los plazos marcados y aprobados por sus accionistas: el primer trimestre de 2023. La SEC, como regulador del mercado bursátil estadounidense, le recordó a Ferrovial que debía adaptar sus cuentas y sus informes financieros a la normativa y legislación correspondiente. Todo ello antes de lanzarse al mayor mercado financiero del mundo. Y es que cualquier empresa que quiera funcionar en un determinado mercado debe cumplir con las normativas de dicho mercado, sea España, Países Bajos o Estados Unidos.

Ferrovial no pudo entonces cumplir con los plazos -por no tener ya adaptada su información financiera- y ha tenido que retrasar el que fuera su objetivo principal en el plan presentado a los accionistas hace un año. Finalmente lo hará -si no cambia nada en las próximas horas- este jueves 9 de mayo o bien, “en torno a esa fecha”, como ha avanzado la propia multinacional en un comunicado remitido a última hora del viernes, tras culminar ya el proceso de revisión regulatoria de la SEC para poder cotizar en el Nasdaq. “Nuestra cotización con acciones ordinarias en el Nasdaq es la primera para una empresa del IBEX 35 y es el fruto de años de dedicación a la creación de soluciones de infraestructuras innovadoras para las comunidades estadounidenses”, ha celebrado Rafael del Pino, presidente de Ferrovial en el comunicado en el que revelan la segunda fecha prevista -tras el fracaso del primer plazo marcado- para desembarcar finalmente en Wall Street.

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