Banco Santander se desploma un 5% en la sesión bursátil de este lunes tras conocerse que el régimen iraní usó una cuenta del banco, en concreto de Santander UK, para financiarse y mantener relaciones económicas con el exterior. Fuentes conocedoras de la investigación aseguran que fue un testaferro de una las filiales del régimen iraní, un ciudadano propietario al 100% de Pisco UK, quien abrió una cuenta en el área retail, es decir, una cuenta particular, en la filial de Grupo Santander en Reino Unido. Una cuenta que ya ha sido cerrada, según confirman fuentes conocedoras a ElPlural.com, en el momento en que se descubrió la relación de este cliente con el régimen iraní. 

La entidad asegura que no ha incumplido la normativa estadounidense y defiende ejercer los controles necesarios para evitar problemas como estos. "Banco Santander no ha incumplido la normativa estadounidense sobre sanciones impuestas a terceros de acuerdo con nuestra investigación. El banco cuenta con políticas y procedimientos para asegurar que se cumplen los requisitos relativos a las sanciones. Santander continuará colaborando proactivamente con las autoridades británicas y estadounidenses pertinentes", mantiene el banco como postura oficial. La entidad defiende tener los procedimientos activos necesarios en todos los mercados en los que opera, para supervisar y controlar aspectos como este.

"No podemos hacer comentarios sobre clientes. Santander cumple con sus obligaciones legales y regulatorias, y ponemos mucha atención en el cumplimiento normativo sobre sanciones impuestas a terceros", ha asegurado un portavoz de Santander UK tras conocerse la apertura de la cuenta de este cliente en la entidad. 

Una información que ha revelado el medio internacional Financial Times este fin de semana y que se traduce en caídas bursátiles para la entidad, al menos durante las primeras horas de cotización del parqué nacional. Los títulos de Banco Santander pierden alrededor de un 5% en los momentos posteriores a conocerse la información publicada a nivel internacional en las últimas horas, y cotizan alrededor de los 3,69 euros por acción. El desplome tras conocerse la relación con el régimen iraní, a través del testaferro que abrió una cuenta en la filial británica del banco, ha llevado al Santander a perder el nivel de cotización que alcanzó tras presentar su beneficio anual en récord el pasado miércoles 31 de enero, lo que le llevó a dispararse en el Ibex 35. 

Un testaferro de Pisco UK abrió una cuenta en Santander

El medio británico especializado Financial Times ha publicado este domingo que el régimen iraní se había servido del banco, a través de la apertura de una cuenta, así como de Lloyds Bank, para financiarse y evitar sanciones internacionales. Según la investigación a la que ha tenido acceso el diario británico, ambos bancos habrían proporcionado cuentas a empresas propiedad de Petrochemical Commercial Company (PCC), firma que se encuentra bajo la propiedad del régimen iraní. Fuentes conocedoras de la investigación confirman a ElPlural.com que la cuenta del testaferro de Pisco UK en el banco se cerró en el mismo momento en que se comprobó la relación entre el testaferro propietario de la cuenta abierta en Santander UK con el régimen iraní. 

Según explica Financial Times, Irán habría usado al Santander y a Lloyds Bank como herramientas financieras para mover dinero de forma encubierta y evadir sanciones internacionales. El medio especializado detalla, según documentos a los que asegura haber tenido acceso, que tanto el Banco Santander en Reino Unido como Lloyds han dado cobijo a cuentas de compañías en manos de Petrochimical Commercial Company (PCC), empresa iraní con sanciones internacionales a la hora de mover dinero. La petrolera forma parte de una red internacional de empresas acusadas por Estados Unidos de funcionar como un vehículo para generar grandes cantidades de dinero al servicio de la Guardia Revolucionaria de Irán, así como de haber trabajado con la inteligencia rusa para financiar milicias cercanas al régimen iraní.

El medio revela que, desde que Estados Unidos interpuso sanciones internacionales sobre PCC y sus filiales, el régimen iraní habría utilizado testaferros y empresas con sede en Reino Unido para poder recibir así fondos procedentes de sociedades pantalla. En el caso concreto del testaferro que abrió la cuenta en el Santander, según el registro mercantil británico, Pisco UK es propiedad 100% de Abdollah-Siauash Fahimi, de nacionalidad británica “Con todo, documentos internos, algunos de los cuáles han sido filtrados por WikiIran (una página web relacionada con la oposición iraní) muestran cómo Pisco está en realidad controlada totalmente por PCC y que Fahimi firmó un acuerdo con la compañía para actuar siguiendo los intereses de la misma”, asegura Financial Times.

Es más, el medio asegura que el testaferro de Pisco UK, "ha usado una dirección de correo de PCC para intercambiar mensajes con cargos oficiales de la compañía asentados en Tehrán" e incluso que "fue director de PCC UK entre abril de 2021 y febrero de 2022, según el registro mercantil”, denuncia el medio británico. “En 2021, la cuenta de Pisco UK en el Banco Santander recibió una transferencia de otra empresa china llamada Black Tulip, la cuál, según documentos internos de PCC es otra sociedad pantalla controlada por otro empleado de PCC”, detalla la información en base a la documentación a la que ha tenido acceso.