Es verano, hace calor y los días son más largos, como dijo la vicepresidenta Soraya Saénz de Santamaría cuando en mayo de 2011, gobernando Zapatero, bajó el paro. El Banco de España ha certificado que en el segundo trimestre de este año (abril, mayo y junio), no hay ni atisbo de crecimiento económico, pero detecta cierto "alivio en la tónica contractiva", según palabras textuales de su último boletín. Y el turismo parece ser el responsable.

Caemos, pero no tanto
Después de un 2012 catastrófico, todo lo que sea mejorar unas décimas suena a alivio, pero las cosas son así: el consumo sigue cayendo, aunque menos que en el primer trimestre pero cae, no hay más que darse una vuelta por tiendas y centros comerciales. Se sigue destruyendo empleo, pero menos.

Suben los precios y bajan los sueldos
El Banco de España certifica que, trimestre a trimestre, los salarios bajan en España. Han bajado casi un 2% en lo que va de año, pero los precios suben. Concretamente el Índice de Precios al Consumo (IPC) ha subido el triple que los salarios, y eso que la inflación está contenida en el 1,7%. Con menos sueldo y precios más caros, amén de más impuestos, es imposible que crezca el consumo, cae menos, pero cae.

Otro récord negativo de hipotecas
Aunque el precio de la vivienda también sigue cayendo, con seis millones de desempleado según la EPA y los bancos con el grifo del crédito cerrado, es imposible que el mercado inmobiliario se active.

En abril la firma de hipotecas cayó un 18%, con lo que se suman ya tres años consecutivos de descenso de la firma de hipotecas, que está en mínimos históricos.

En definitiva, este trimestre que concluye con junio seria levemente menos malo que el anterior, que fue un absoluto desastre.