El avance de la economía española continúa sobrepasando todas las previsiones emitidas por los organismos nacionales e internacionales. Los valores pronosticados a comienzos de año se han quedado muy atrás y las actualizaciones se suceden con cada vez menos distanciamiento debido a la mejora continuada que desprenden los datos. El Producto Interior Bruto (PIB) se engrosó otras ocho décimas en el segundo trimestre, misma progresión que la registrada en los tres meses precedentes, y registra una evolución interanual del 2,9%, datos que han obligado al Consejo General de Economistas (CGE) a corregir sus estimaciones.
La corporación ha elevado medio punto sus previsiones, del 2,4% al 2,9%, tan solo un mes después de haber tenido que sumarle otras dos décimas, del 2,2% al 2,4%. Lejos queda el 1,6%, a casi punto y medio, que preveía el CGE a principios de año. La progresión publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha sorprendido a los economistas, que reconocen que “ha sido mayor de lo esperada”. En su publicación mensual, coincidiendo con el análisis del INE, explican que esta mejora se debe al “buen comportamiento tanto de la demanda interna como la externa, con un incremento de las exportaciones”.
El futuro también es halagüeño para los economistas, que apuntan a “las buenas expectativas del sector turístico, la moderación de la inflación en 6 décimas y la robustez del mercado de trabajo” para adelantar “un incremento similar (0,8%) en el tercer trimestre”. “Se espera un crecimiento similar al de los dos trimestres anteriores gracias fundamentalmente al sector servicios por el empuje de turismo, cuya campaña de verano se espera que se alargue hasta el mes de octubre”, desgrana el informe.
Menos inflación y resistencia del empleo
Los economistas también se muestran optimistas en materia de empleo. El Consejo eha destacado el crecimiento “robusto” del mercado de trabajo durante el segundo trimestre de 2024, algo que han ido confirmando los datos de paro y afiliación a la Seguridad Social. Además, los últimos datos han dado un nuevo espaldarazo a esta materia, pero economistas mantienen la tasa de paro esperada. En consecuencia, prevén que la tasa de desempleo se reduzca hasta el 11,2%, lo que la sitúa por debajo del 11,4% que recogía el Observatorio Financiero en mayo, pero igual que en junio.
En cuanto a los precios, el organismo liderado por Valentín Pich contempla en su Observatorio Financiero una rebaja de dos décimas para la previsión para el Índice de Precios al Consumo (IPC) medio a final de 2024. Así, la cifra cae hasta el 3% gracias al buen dato de inflación y de inflación subyacente de julio, aunque aún se mantiene por encima de la media europea.
Mantienen el déficit y la deuda
Atendiendo a otras variables, los economistas han mantenido los valores dado hace un mes para las estimaciones de déficit y deuda para el cierre de año. El Gobierno está decidido a complementar el saneamiento de las cuentas públicas con el despliegue de políticas sociales activas y el ensanchamiento del Estado del Bienestar, todo ello de la mano de una mejora del mercado laboral y un crecimiento económico sostenido. España fue excluida hace algo más de un mes de la lista negra del déficit de la Comisión Europea después de muchos años, pero debe seguir reduciendo sus valores.
La recuperación de las reglas fiscales que se activará en 2025 y la vuelta del control de gasto a Europa amenaza a grandes economías como la francesa o la italiana. En contraposición, el CGE estima que España concluya 2024 con un déficit en el 3,2%. La deuda pública seguirá la misma senda de descenso de los últimos años y los economistas apuntan hacia el mismo valor de junio, el 106% sobre el PIB. Asimismo, se espera que los ingresos fiscales se incrementen en la segunda parte del año.