Cada vez son más los trabajadores que se situan en torno los 1.000 euros de sueldo mensual, por lo que vivir al día es ya un sacrificio. Imagínense ahorrar, ¿utopía?. No obstante, conseguir ahorrar con sueldos tan precarios como los que están presentes en nuestra sociedad es posible, aunque para ello haya que 'estrujarse las neuronas'. 

Para poder ahorrar lo primero que debemos de conocer en profundidad es nuestra economía y para ello vamos a abordar una serie de pasos: en primer lugar deberíamos destinar el 10% de nuestro salario a una cuenta de ahorro según percibamos nuestra nómina y a la que no frecuentemos el acceso. Se trata de una inversión a futuro: por ende, ese dinero no se toca.  Por otro lado existen varios tips que nos pueden ayudar en nuestro mes a mes: ¿Cómo?

Tips para ahorrar cobrando 1.000 euros

En primer lugar, anotando en una agenda, una hoja de excell o una aplicación móvil el control de nuestros gastos. Este método fue creado por la periodista Motoko Hani en 1904 y es denominado como el Método Kakebo: consiste en apuntar cada gasto realizado en una agenda ordenadas por categorías basadas tanto en el tiempo como en la temática. De esta forma, podremos ponernos metas de ahorro factibles, al conocer el estado real de nuestras cuentas. Es decir, obtendremos una versión real de nuestra economía.

Por otro lado hay que priorizar gastos: los principales gastos que tenemos que tener en cuenta son los domésticos, es decir los relativos al pago del alquiler de una vivienda o una hipoteca, que supondrán entre el 25-50%  de nuestro salario neto, dependiendo de la localización en la que nos encontremos, ya que no es lo mismo vivir en Madrid que en Murcia, donde el coste de la vivienda es mucho más barato. 

Respecto a los suministros, como el agua, el gas o la luz, es de especial relevancia revisar las tarifas contratadas y compararlas en el mercado. Por otro lado, es aconsejable el uso de bombillas LED, que además de ahorrar energía, tienen una vida útil más larga; usar reductores del caudal del agua en los grifos o intentar que las fuentes de calor y frío estén activas el menor tiempo posible y para ello es necesario optimizar la protección y el aislamiento térmico o como alternativa en invierno echarse una buena manta. Se recomienda emplear ventilación natural y priorizar el uso de materiales ecológicos o reciclados. También mes útil apagar las luces y los aparatos eléctricos cuando no se están utilizando, entre otros consejos domésticos así como optar siempre por electrodomésticos eficientes a nivel energético, es decir, aquellos en los que encontramos la etiqueta  A+++

Existen millones de exhibiciones, exposiciones, parques o rincones que explorar que son totalmente gratuitos. ¿Nos lo hemos planteado? 

Por otro lado, es muy necesario que tengamos en cuenta cuáles son las coberturas que necesitamos, por ejemplo: ¿necesitamos un coche o existen alternativas más económicas que faciliten nuestra movilidad? En cuanto a los seguros de salud, España cuenta con una sanidad pública de alta eficiencia aunque los tiempos para muchas de las pruebas sean prolongados en el tiempo. Si es necesario contratar un seguro privado, la mejor opción es comparar cada una de las opciones que ofrecen las aseguradoras y adaptar los seguros a nuestras necesidades reales. Sin extras. 

Alimentación y moda

En lo que se refiere a la alimentación hemos de tener en cuenta qué productos son los que realmente necesitamos. Es aconsejable que a la hora de ir a realizar la compra vayamos con el estómago lleno, para no caer en tentaciones que suponen un gasto añadido a nuestra cesta final. También es aconsejable realizar una lista de los productos necesarios antes de salir de casa y ceñirnos a ella. Por otro lado, las aplicaciones de alimentación son de las más desarrolladas en el mercado. Aprovechemos este avance en digitalización para poder encontrar las superficies con mejores ofertas y precios más baratos. Y por supuesto, una vez que estemos delante de la estantería repleta de productos sería conveniente apostar por las marcas blancas, que son mucho más económicas. 

En cuanto a la ropa, nos enfrentamos a uno de los mayores hándicaps. Una buena idea es depositar toda la ropa que tenemos sobre nuestra cama. Esto nos ayudará a ser conscientes verdaderamente de cuáles son nuestras necesidades -si las tenemos- en cuanto al outfit. Por otro lado, comparar los precios en diferentes comercios o sumarse a aplicaciones de intercambio de vestuario sería recomendable para nuestra economía y también para el medio ambiente. Es decir, de una u otra forma es necesario sumarse a la economía circular.  

Por otro lado invertir en caprichos como pueden ser plataformas de pago como Netflix, HBO o Amazon quizá sea algo de lo que podemos prescindir. ¿Realmente vamos a emplear todas esas plataformas? Elijamos una o compartamos gastos con un grupo de amigos o amigas. En cuanto al ocio y el entretenimiento, comer fuera de casa o ir al cine cada fin de semana puede ser excesivo para nuestro 'diminuto bolsillo'. Por ello, hay que echarle imaginación: un picknik con amigos, comer e casa o en familia puede ser también una experiencia fantástica que implica ahorro. Por otra parte, existen, especialmente en las urbes, millones de exhibiciones, exposiciones, parques o rincones que explorar que son totalmente gratuitos. ¿Nos lo hemos planteado?