El Gobierno se reúne este viernes en un Consejo de Ministros extraordinario para aprobar el Ingreso Mínimo Vital (IMV) que se podrá cobrar desde el próximo 1 de junio, con el objetivo de reducir los niveles de pobreza entre los más vulnerables, especialmente tras el impacto por la crisis del coronavirus.

El Ingreso Mínimo Vital es una renta básica que el Gobierno ha diseñado para ayudar a los hogares en situación de “pobreza severa”. Según la Encuesta de Población Activa (EPA), en España hay 1,1 millones de hogares con todos sus miembros en paro y casi 600.000 sin ningún tipo de ingreso.

Tal y como ha explicado el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, en varias ocasiones, la prestación está dirigida a los hogares y no a personas individuales. Según las últimas cifras del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, la medida beneficiará a 850.000 hogares, que se traduce en 2,3 millones de ciudadanos.

La medida supondrá un coste de 3.000 millones para el Gobierno, que compatibilizará estas ayudas con las prestaciones autonómicas. En concreto, lo que hará será establecer el importe del Ingreso Mínimo Vital, según las circunstancias, y abonar la cantidad para alcanzarlo a quienes estén por debajo de esa cantidad.

Cuantía del Ingreso Mínimo Vital

La cuantía del Ingreso Mínimo Vital, tal y como han explicado en varias ocasiones los responsables, tendrá un margen de entre 462 y 1.015 euros, con amplias variaciones según la estructura del hogar.

Por ejemplo, una persona sola recibiría 462 euros como prestación, que ascendería a los 600 euros en el caso de ser una pareja sin hijos. Igualmente, si los progenitores tienen un hijo a su cargo, la cantidad aumenta hasta los 738 euros y se fija en los 700 euros en el caso de familias monoparentales.

La cantidad aumenta según el número de hijos y, en el caso de dos niños, el ingreso aumenta hasta los 877 euros para las familias con dos progenitores y hasta los 838 euros en familias monoparentales. El máximo ingreso se daría con tres o más hijos, en los 1.015 euros en el caso de una familia con dos progenitores y de 977 euros en familias monoparentales.

Sin embargo, no se trata de una prestación complementaria, sino de la cobertura de la diferencia existente entre los ingresos del receptor de la ayuda y "el importe máximo de la prestación". Es decir, si una familia ingresó 400 euros mensuales de media en 2019 y cumple los requisitos para recibir una ayuda de 600 euros a través del ingreso mínimo vital, el Estado le daría la diferencia, 200 euros al mes.

Requisitos mínimos

Entre los requisitos para poder acceder a la ayuda se encuentra, en primer lugar, situarse entre las edades comprendidas entre los 21 y los 65 años, así como no tener una vivienda en propiedad de más de 100.000 euros.

En este caso, solo será necesario firmar una declaración responsable asegurando que no se tienen ingresos, donde también se debe explicar el número de “personas que integran la unidad de convivencia, quién es la persona solicitante o qué parentesco hay entre ellas”, según el borrador desvelado por El Mundo hace unas semanas. Además, se debe incluir el grado de discapacidad o dependencia en el caso de darse esa situación.

Por otro lado, el Gobierno ha matizado que el titular puede recibir la ayuda si es mayor de edad y tiene hijos o personas a su cargo y en el caso de víctimas de malos tratos o de trata, tanto para los ciudadanos españoles como para los extranjeros.

Otro de los requisitos para solicitar la prestación pasa por ser demandante de empleo y haber solicitado las ayudas disponibles, tal y como avanzaba el borrador. El receptor debe ser demandante de empleo si "se encuentra capacitado para desarrollar una actividad laboral" o que todos los miembros del hogar hayan "solicitado previamente las pensiones y prestaciones vigentes a las que pudieran tener derecho".

El solicitante debe residir en España al menos durante el año anterior a la presentación de la solicitud y, en el caso de no tener hijos a su cargo, debe “haber vivido de forma independiente” durante al menos tres años antes de la solicitud.

Para acceder a la cuantía, el requisito clave es que los ingresos mensuales, con referencia a 2019, sean inferiores a la cantidad de las ayudas. En este caso, el Estado aportaría la diferencia entre los ingresos del receptor de la ayuda y el importe máximo de la prestación que le corresponde.

Supervisión y sanciones

En principio solo bastará con la buena fe del receptor para presentar la ayuda, pero será el Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS) quien supervisará el cumplimento real mediante “comprobaciones, inspecciones, revisiones y verificaciones”. En caso de encontrar alguna irregularidad, se podrá suspender la prestación como medida cautelar y solicitar la documentación al receptor.

Asimismo, el borrador de El Mundo plantea la vigilancia para asegurar que se destina a “las necesidades básicas de todos los miembros de la unidad de convivencia” y avanza duras sanciones para ello. Según esta fuente, el importe de la multa irá desde uno hasta seis meses sin recibir la prestación, así como la devolución de las cantidades recibidas de forma indebida.

También serían sancionados aquellos receptores que no administren los ingresos recibidos de forma responsable o que no comuniquen "cualquier cambio o situación que pudiera dar lugar a la modificación, suspensión o extinción de la prestación" en un plazo de un mes. Asimismo, deberán presentar anualmente la Declaración de la Renta para demostrar su situación.

Finalmente, los solicitantes del ingreso mínimo vital deberán "seguir un itinerario individualizado y personalizado de inserción", tutelado por el ministerio, "que contemple el diagnóstico sobre su empleabilidad, así como las medidas de políticas activas de empleo dirigidas a mejorarla", reza el borrador.

En cuanto a la gestión con las comunidades autónomas, el Gobierno ha alcanzado un acuerdo con el PNV. Así, en el País Vasco y Navarra serán las comunidades quienes asuman los trámites de la prestación. Ante esto, los presidentes de otras comunidades también han pedido participar en la cogestión del ingreso.

¿Cómo solicitarlo?

El ministro de Seguridad Social ha avanzado que el 1 de junio los 100.000 hogares más vulnerables recibirán esta ayuda de forma automática, sin necesidad de solicitarlo. Sin embargo, a partir de ahí se podrá tramitar a través de la Seguridad Social y otros canales adicionales de la Administración Pública para agilizar los trámites.