La vallisoletana Ángela de Miguel ha ganado las elecciones para hacerse con la presidencia de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme). La candidata, impulsada por el presidente del CEOE, Antonio Garamendi, será por tanto la encargada de tomar el relevo a Gerardo Cuerva. "Empezamos una nueva etapa. Hoy es un día para celebrar la democracia interna. Una democracia que refuerza la legitimidad y la representatividad de esta gran organización que es Cepyme", ha celebrado la también presidenta de CEOE-Cepyme en Valladolid.
De Miguel ha conseguido reunir 246 votos de un total de 466 censados procedentes de 147 organizaciones, es decir, el 52,7% del total. Por su parte, Cuerva ha obtenido 216 votos, al margen de un único voto en blanco y tres nulos. Respecto al apoyo recibido por parte de De Miguel de las organizaciones, el Comité Ejecutivo que acompañará a la vallisoletana en los próximos cuatro años reúne a las principales patronales, como la madrileña CEIM, la catalana Foment del Treball, la valenciana CEV o la patronal de autónomos ATA. En esta lista de apoyos se incluye también a los altos cargos de patronales como el presidente de Confemetal, José Miguel Guerrero, o el de Ceaje (jóvenes empresarios), Fermín Albaladejo.
A mucha distancia del modelo presentado por De Miguel, Cuerva, hasta ahora presidente de Cepyme, ha optado por presentar 24 nombres, incluida su propia candidatura. Había dejado varios puestos vacantes -cinco, que serían seis si se cuenta al secretario general- reservados, asegura, para organizaciones que han querido formar parte de su lista pero que, por diversos motivos, no han podido hacerlo oficialmente. El motivo, según Cuerva, estriba en las presiones de la CEOE. “Me consta que ha habido llamadas insistentes por parte de ejecutivos de la CEOE, incluso del propio presidente, con un mensaje claro: o estás conmigo o contra mí”, afirmó recientemente Cuerva, en un mensaje que pone de manifiesto la tensión creciente entre Cepyme y la patronal mayoritaria.
Entre los nombres que sí figuran en su lista destacan Fernando Jesús Santiago, presidente de la Asociación Nacional de Gestores Administrativos; Alfonso Hernández, vicepresidente de Confemetal; o Luis Rodulfo, vicepresidente de la Confederación Nacional de la Construcción (CNC). También cuenta con apoyos de estructuras territoriales como CEOE en Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cantabria, Sevilla, Murcia o Badajoz, territorios que Cuerva identifica con sectores productivos más modestos, pero estratégicos en la economía real.
Una Cepyme "abandonada" con Cuerva
El proceso que este martes se deja atrás con la elección de la nueva presidenta de la patronal de las pymes no ha estado exento de polémica. El hasta ahora líder de Cepyme ha intensificado sus esfuerzos en la denuncia de supuestas presiones por parte de la CEOE. De hecho, una de las propuestas que hizo durante su mandato fue la de limitar el voto delegado de cara a los siguientes comicios mediante una reforma del régimen interno de la patronal. Una iniciativa que quedó finalmente en saco roto después de que desde la organización hayan trasladado que la intención de Cuerva de limitar el voto nace de "presiones económicas" ejercidas desde la CEOE y vinculadas al uso del patrimonio sindical, cuya titularidad recae en la entidad presidida por Garamendi.
El cambio de reglamento interno de la Confederación salió adelante con el apoyo de la Junta Directiva y uno del Comité Ejecutivo, detonante de la batalla interna que se ha vivido en los últimos meses entre sendas organizaciones patronales. Una lucha que trascendió los informes jurídicos, para consolidarse en un cruce de acusaciones entre el presidente Cuerva y la candidata de Garamendi en la carrera electoral. De hecho, la batalla ensanchó la brecha entre sendos presidentes, hasta el punto de que Cuerva ha admitido “múltiples presiones” por parte de Garamendi para que éste no optara a la reelección. Pero también señala al Gobierno central; una acusación que rima en consonante con el apoyo de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, desde fuera.
En la presentación oficial de su candidatura, Cuerva deslizó que es probable que la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, no fuera una de las personas que acogiera su anuncio con más alegría. Mucho menos si resultara el ganador de los comicios patronales. En este sentido, el presidente de Cepyme aboga por una entidad que evada el yugo que Garamendi pretende imprimir a la patronal de las pymes. “Busca un funcionario a las órdenes del presidente de la CEOE ocho horas al día, cinco días a la semana”, espetó. Por ello, reivindica la autonomía de su organización: “No podemos estar callados ni ser comparsas de nadie, sino que es fundamental que nuestras reivindicaciones se defiendan con total firmeza y compromiso”.