El atraco que ha marcado un antes y un después en todo el mundo se acaba, y es que La casa de papel pone punto final este viernes después de cinco temporadas -la última dividida en dos partes-. La banda de El Profesor (Álvaro Morte) intentará la casi misión imposible de salir del Banco de España ante la atenta mirada y el apoyo de millones de fans que la siguen desde diferentes partes del planeta.

La producción de Netflix llegó a coronarse como la más vista en todo el mundo y a consolidarse como una de las apuestas más seguras de la plataforma audiovisual. Más allá de la trama en sí, esta ha sugerido infinidad de debates en torno a, por ejemplo, la función que juegan los medios de comunicación en la movilización de masas.

Pero si algo ha puesto de moda la emisión española ha sido el Bella Ciao. La popular canción que entonaban los partisanos italianos ha vuelto a convertirse en un himno a raíz de la serie y ha permitido, en parte, que se recuerde su significado.

Tanto es así que han sido muchos los artistas que la han versionado desde el éxito de La casa de Papel. La última en hacerlo ha sido Becky G con una versión reggaetonera que, para bien o para mal, no ha dejado indiferente a nadie.

Hay quienes agradecen a la cantante traer el ritmo latino al tema, mientras que otros critican que se toque de esta manera una “canción histórica”. También los hay que dan un punto de humor al asunto: “Al fascismo ya no que hay que plantarle cara, hay que darle la espalda y perrear duro”.

 

En el videoclip de la banda sonora se observa a Becky G con los ya emblemáticos mono rojo y máscara de Dalí, a la vez que entona una parte en italiano y otra en inglés.

El Bella Ciao no es el único himno de este tipo que ha recuperado la serie, ya que en el final de su último capítulo sonaba el Grandola, Vila Morena de la mano de Pablo Alborán y Cecilia Krull. Este tema guarda una estrecha relación con Portugal, pues fue santo y seña del país vecino durante la Revolución de los Claveles