La comparecencia posterior al Consejo de Ministros de Soraya Sáenz de Santamaría ha estado muy marcada este viernes por la celebración de la Diada en Cataluña y la manifestación independentista convocada en Barcelona. Por un lado la vicepresidenta ha avisado al presidente de la Generalitat, Artur Mas, que una cosa es tener mayoría para gobernar -como apunta la última encuesta del CIS- y otra distinta decidir "sobre lo que es España", algo que corresponde al conjunto de los españoles.

La Diada ha acabado en "acto electoral" de Mas
Respecto al simbolismo y el significado de este 11-S, Sáenz de Santamaría ha asegurado que al principio de la democracia la Diada era una fiesta para todos los catalanes, después pasó a ser una jornada reivindicativa de una parte de la sociedad, y ahora es un "acto electoral" del presidente Mas. Por ello, la vicepresidenta ha vuelto a apelar a la "neutralidad" y a la "legalidad" para no utilizar los recursos públicos pagados con los impuestos de todos los ciudadanos para que hagan campaña electoral "unos pocos".

Cautela ante los sondeos
Preguntada si cree que la estrategia del Gobierno central para Cataluña ha fracasado a la vista de los resultados del PP que adelantan las encuestas para las próximas elecciones autonómicas, Sáenz de Santamaría ha preferido no comentar los sondeos, aunque sí ha pedido que se revisen los resultados de toda la serie histórica. Además, ha reivindicado que la labor del Gobierno central en Cataluña que ha permitido, por ejemplo, seguir pagando los servicios públicos de los ciudadanos de la comunidad.

Mensaje a Margallo
Pero la vicepresidenta también ha lanzado un mensaje interno al Gobierno, concretamente al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, quien defendió ayer en Barcelona la vía de la reforma de la Constitución para encajar "el hecho catalán" y cambiar el sistema de financiación para ceder prácticamente al completo el IRPF a Cataluña como solución a las reivindicaciones soberanistas. Según Sáenz de Santamaría se trate de una posición exclusivamente "personal" e "individual" del titular de Exteriores. "Es la posición del ministro", ha subrayado sobre esa posibilidad de reforma.