Carles Puigdemont ha sido el último protagonista del semanario satírico Charlie Hebdo que saltó trágicamente a la fama internacional después de que su redacción sufriese un ataque yihadista en 2015.

La siempre irreverente publicación ha vestido al expresident catalán como un yihadista, ataviado con una chilaba con los colores de la estelada y un kufi, un pequeño gorro, con los colores de la senyera, la bandera independentista, así como luciendo una abultada barba negra.

El texto de la caricatura, muy comentaba en redes, rezaba: “Puigdemont se radicaliza en Bélgica”, en referencia a las duras palabras que dirigió el líder catalán a las instituciones europeas en su discurso frente a 200 alcaldes independentistas en Bruselas la semana pasada.

Charlie Hebdo ya se refirió hace un mes al conflicto catalán con una caricatura en la que afirmaba que “los catalanes, más gilipollas que los corsos” y en el dibujo, unos catalanes encapuchados y armados como terroristas exigiendo "un debate" con los ojos inyectados en sangre.