Vox ha vuelto a dejar de lado al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso y, una semana después de vetar una declaración institucional en la Asamblea de Madrid con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, ha decidido no asistir al acto que la presidenta madrileña ha celebrado en la Real Casa de Correos de Madrid.

A pocos días para que el Ejecutivo regional intente alcanzar un acuerdo con la formación de extrema derecha por los Presupuestos autonómicos, la presidenta de la Comunidad de Madrid ha visto cómo la ultraderecha se ha vuelto a posicionar en contra de los actos contra la violencia contra la mujer.

Ayuso deberá ceder con Vox para conseguir aprobar las Cuentas públicas, en un momento en el que el discurso de ambos partidos parece ser muy diferente. La dirigente madrileña defendía este jueves la necesidad de seguir "ayudando a las mujeres que sufren acoso" y para ello ha anunciado la creación de un centro integral para las víctimas de violencia de género.

"Me gustaría recordar a todas las mujeres que hoy están siendo explotadas, marginadas o están solas. La Comunidad de Madrid va a poner todos los recursos a su disposición. La violencia contra la mujer es un problema global”, ha justificado la presidenta regional.

Una postura muy lejana a la que ha mostrado, en varias ocasiones, Rocío Monasterio, como ya hizo el pasado 7 de julio. La portavoz de la formación de extrema derecha salió en defensa de los hombres por la falta de presunción de inocencia: "Si te dicen un piropo en la calle, puedes ir a denunciar y ese hombre puede acabar en la cárcel. Se está criminalizando al hombre".

Entre las principales líneas rojas que Vox ha detallado al Gobierno de Ayuso se encuentran la derogación de la Ley LGTBI y una Ley de Igualdad con la que se modifiquen algunos preceptos de las normas de género vigentes relacionados con la presunción de inocencia y la carga de la prueba. Unas exigencias con las que Ayuso deberá lidiar, a falta de un mes para tratar de aprobar las Cuentas públicas.

"Ayuso se define como una antifeminista convencida"

Una ausencia de Vox que algunos de los principales partidos de la oposición, como Más Madrid, no consideran algo preocupante, ya que ponen la diana contra la presidenta de la Comunidad por continuar negociando los Presupuestos aceptando las exigencias del partido ultraderechista.

Mónica García ha cargado contra el Gobierno regional y, en declaraciones a ElPlural.com, asegura que lo que más preocupa a los madrileños es que "mientras Ayuso entrega premios a colectivos, institutos y mujeres que son referentes contra la violencia machista, a la vez, esté desarrollando una agenda ultra".

"Se está alineando con las tesis negacionistas, recortando partidas presupuestarias y definiéndose como una antifeminista convencida. La lucha contra la violencia machista no admite medias tintas y tampoco admite ninguna política de negación”, advierte la portavoz de Más Madrid.