Un episodio más del bautizado como Caso espías que salpica al PP de Madrid y en el que aparece subrayado en rojo un nombre: el de Alberto González. En esta entrega, las voces denunciantes acusan al hoy concejal del Ayuntamiento de estafar a afiliados, teniendo estos que sufragarle gastos en lo personal y en lo profesional. Así, alcohol, tabaco, jamón o embutido son algunos de los pagos que la persona presuntamente implicada en la trama habría evitado.
ElPlural.com ha tenido acceso a mensajes de Whatsapp en la que afiliados muestran su enfado a la directora de gabinete de Inmaculada Sanz, vicealcaldesa de Madrid y en las próximas dos semanas alcaldesa en funciones debido a que José Luis Martínez-Almeida disfruta de la luna de miel con Teresa Urquijo. “Se me haca pagar a mí todo de la sede aparte de 150 euros de cuota”, lamentan en una de esas conversaciones, donde un crítico con la situación asegura que se le ha “engañado” para “pagar las cosas de la sede con su dinero personal”. Y en ese conjunto de cosas que González habría dejado a deber se encuentran incluso catas de vinos por valor de 100 euros o, ya en el ámbito más personal, consumiciones en bares.
Un modus operandi habitual
No es el primer episodio de estafa del que se le acusa a González. También como pudo saber este periódico, uno de los hechos más graves que guardan relación con el también secretario general del PP en los distritos de la capital tiene que ver con otro timo que fue perpetrado sobre un afiliado del partido, el famoso hostelero en la capital G.L.
Concretamente, la persona afectada dejó de donar 20 euros mensuales al partido para pagar de manera no intencionada 200 euros al mes mientras estaba “ingresado en estado grave” durante la pandemia. La persona se recuperó meses después de ser ingresado, pero, según relataban los denunciantes, ésta exigió la devolución del dinero -había perdido unos 1.600 euros- sin éxito.
Preguntado por este medio, el hostelero prefirió marcar distancias sobre lo ocurrido. Eso sí, reconoció que se le cobró una cantidad indebida que ya se le había reingresado, asegurando que se debía a un “error de ordenador” y un tema de partido que, prefiere, no trascienda a la opinión pública.
Pero no se trata de casos aislados. En la cena de Navidad del PP de Latina del año 2022, coincidiendo en el tiempo con el presunto espionaje a altos cargos del partido, se da una gestión para que, en última instancia, el secretario general de Nuevas Generaciones, Manuel Pulido -colocado por González, según fuentes- publicara en redes sociales una petición de bizums a su persona para la recogida de juguetes y la Operación Kilo.
Además de esta, fuentes conocedoras de los hechos aluden a otra presunta irregularidad que pasa por la desaparición de afiliaciones que contemplaba información personal y bancaria. Después de una “exhaustiva investigación”, concluyen que Pulido las sustrajo y se las llevó a su casa.
Más exabruptos de Alberto González
En el marco de la denuncia, este periódico ha tenido acceso asimismo a otros exabruptos por parte de González, quien ocupa actualmente la secretaria del PP de los 21 distritos de la capital. En uno de estos, explicaba a su entonces número dos que, en la misma cena de Navidad de la sede del PP del distrito, una afiliada del partido, M.E, debía “calentar y poner cachondos a consejeros y viceconsejeros” con el fin de obtener información.
En la misma línea de la polémica, otro de los capítulos derivadas del tema central de presunto espionaje deja al descubierto un comportamiento racista por parte de González, al calificar como “panchitos” a las personas latinoamericanas, y homófobo, asegurando sobre otra persona que “para ser gay el poco arte que tiene”. Estas palabras encontraron el respaldo de Almeida, quien se limitó a decir que no había leído las informaciones y, por tanto, no podía opinar sobre ellas. “Lo que sí puedo decir es que Alberto González está haciendo un grandísimo trabajo como concejal de Latina y que a mí lo que me importa es su trabajo como concejal de Latina”, añadía.
Trama de espionaje
El diario El País adelantó en exclusiva que en estos momentos hay un procedimiento abierto en el departamento de Derechos y Garantías del PP por el presunto espionaje orquestado por González.
Sin embargo, tal y como pudo saber recientemente ElPlural.com de fuentes conocedoras de esta trama de espionaje, las grabadoras y las órdenes de obtener materiales suculentos para la extorsión van más allá de Bea Fanjul y su entorno, implicando a buena parte de las estructuras de NNGG hasta alcanzar a buena parte de la cúspide actual y pasada de las juventudes populares, así como a concejales y diputados autonómicos de renombre.
Alberto González se limita a “respetar el procedimiento”
En una conversación con ElPlural.com, González señaló que “es una denuncia interna del partido” y que tiene que “respetar el procedimiento” de manera que “cuando se resuelva, se podrá hablar”.
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