El vicepresidente de Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha vuelto a despertar la polémica en el último pleno de las Cortes autonómicas con motivo de la reaccionaria oposición que lidera Vox en contra del recién constituido nuevo Gobierno de coalición encabezado por Pedro Sánchez.

El dirigente de Vox se ha enzarzado con el grupo socialista en las Cortes después de entonar declaraciones en clave machista y al acusar al jefe del Ejecutivo central de instaurar una “dictadura” en esta XV Legislatura. El incidente político se ha producido en el marco en el que el PSOE ha introducido en el pleno el debate de una iniciativa sobre violencia de género, defendida por la procuradora Nuria Rubio, quien ha aludido en más de una ocasión a García-Gallardo por su actitud fuera de lugar del anterior hemiciclo -en el que los socialistas denunciaron que realizó un gesto de felación-, motivo por el que le ha exigido “disculpas”.

Por su parte, Gallardo ha rechazado todas las clases de acusaciones que se han vertido desde entonces contra su persona añadiendo que, las mismas, están “trufadas de todo tipo de mentiras”: “No voy a aceptar ninguna lección de respeto del partido de Tito Berni, Óscar Puente, José Luis Ábalos y Luis Tudanca. No me hagan explicar por qué”, ha sentenciado este miércoles en el pleno.

Debido a los controvertidos hechos que tuvieron lugar en la anterior jornada en las Cortes de Castilla y León, la presidencia de la misma institución ha ordenado retirar una cámara que han colocado previamente los socialistas en el hemiciclo enfocando al vicepresidente, de Vox, tras su tachable actitud dirigida hacia las procuradoras del PSOE, Patricia Gómez y Nuria Rubio, haciendo el gesto de la felación, pese a que el vicepresidente señaló que se trataba de una señal de “lloriqueo”.

Críticas al Gobierno de Sánchez en Castilla y León

Por su parte, la procuradora de Vox, Susana Suárez, ha rechazado la iniciativa socialista en materia de violencia de género para criticar, a la par, “la España de las violaciones en manada, de la impunidad, de la amnistía, del gobierno golpista, de la dictadura de Sánchez y la represión”. Unas palabras que han sido rápidamente replicadas por parte de la bancada socialista.

En voz de la viceportavoz del grupo, Patricia Gómez, ha exigido “un respeto al presidente del Gobierno elegido en las urnas, aunque les escueza”, señalando al partido de ultraderecha. En cuanto a las alusiones de dictadura que lleva profiriendo el partido de Santiago Abascal desde la investidura de Sánchez, la socialista ha llamado a cuidar las palabras porque España ya sufrió una dictadura “durante 40 años, y se llama franquismo”.

En este punto del hemiciclo, el presidente de la Cámara autonómica, Carlos Pollán (Vox), ha advertido de que no iba a retirar del diario de sesiones “ninguna alusión a cualquier ataque que se está produciendo en este país a la separación de poderes y a la Constitución”, en línea así con la defensa del argumentario de su partido, pese a que la ley de amnistía, que se encuentra en la iniciación de su trámite parlamentario, se enmarca dentro de los márgenes de la Carta Magna.

Debido a este posicionamiento, la portavocía socialista ha señalado a Pollán: “Está mucho peor que el presidente de las Cortes, que tiene una labor institucional y que representa a todos, resulta inaudita que haya hecho las calificaciones que ha hecho”, unas palabras que ha acompañado con una calificación directa a la postura del presidente de las Cortes: “Lamentable”.

Gallardo, a la cabeza de las protestas en Ferraz

Cabe recordar que, en varias de las protestas contra la ley de amnistía que han tenido lugar en los últimos días en la calle madrileña de Ferraz, donde se encuentra la sede estatal del PSOE, se presentó el vicepresidente de Vox en primera línea. La semana pasada, ejemplo de ello, se viralizaron una serie de imágenes del dirigente castellanoleonés gritando “noviembre nacional” con megáfono en mano al unísono de cientos de manifestantes, calentando y animando así la protesta.

Debido a su claro posicionamiento en esta causa, Gallardo se enfrentará próximamente a una denuncia que ya anunció que interpondrá el que fuera único procurador de Ciudadanos en Castilla y León y que gobernó previamente junto al popular Alfonso Fernández Mañueco, Francisco Igea. Este va a denunciar al dirigente de Vox por “emprender acciones y manifestaciones” que podrían ser constitutivas de “un delito de odio”, tipificado en el art. 510.1 a) del Código Penal.