Nuevo incidente en las Cortes de Castilla y León, mismo protagonista. El pleno debatía una proposición del Partido Popular cuando el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, realizaba un “gesto de una felación” a una diputada del Partido Socialista, según ha denunciado la portavoz adjunta al Grupo Socialista, Patricia Gómez Urbán. El presidente de la Cámara, Carlos Pollán, también de Vox, ha suspendido el pleno por cinco minutos tras llamar a todos los portavoces ante las acusaciones sobre estos gestos obscenos del número dos del Ejecutivo de Alfonso Fernández Mañueco, quien poco después ha matizado “las conductas que me atribuyen injustamente”.

Los portavoces de todos los grupos, acérquense un momento aquí a la Mesa”, reclamaba el presidente de las Cortes desde su posición habitual en la Mesa del Parlamento. Pollán ha conversado con los principales responsables de los grupos en la Cámara para reclamarles, según ha asegurado el portavoz de UPL, Luis Mariano Santos, que trasladen a todos los miembros de la Cámara regional “que se porten bien” y no “insulten” en los plenos.

Tras ello, se ha reanudado la sesión, con el protagonista de la polémica tomando la palabra por “no menos de tres minutos” con el fin de “matizar” las acusaciones que le “atribuye el Partido Socialista”. El vicepresidente ultraderechista presuntamente habría realizado un gesto a dos procuradoras socialista que consistió en llevarse la mano a la cara para criticarlas por llorar. Al menos así lo trasladan desde el entorno de García-Gallardo, a quien la viceportavoz socialista le acusaba de practicar un “gesto obsceno” en el que simulaba una “felación”. “Indigno”, censuran miembros del PSOE.

La (pen)última polémica de Gallardo

La indignación socialista ha abonado el camino para que el portavoz del Grupo Mixto, Francisco Igea, se sumase a los reproches al vicepresidente castellano y leonés. El ex de Ciudadanos corroboraba la versión de las procuradoras del PSOE y calificaba a García-Gallardo como un “absoluto impresentable”. “No doy crédito”, confesó antes de continuar con el debate, al tiempo que afeaba que su intervención en el debate le ha servido para “anunciar a todo el mundo que va a ir a acosar a la sede del PSOE esta tarde”.

Gallardo lleva varios días tachando de “traidores” a los representantes socialistas de Castilla y León y de otras comunidades, como al presidente de Asturias, Adrián Barbón. El jefe del Ejecutivo asturiano reclamó a su homólogo castellano y leonés que desautorizara a su vicepresidente, aunque la súplica del socialista cayó en saco roto. Al menos por el momento.

Lo cierto es que el pleno continuó, con el portavoz del Grupo ultraderechista tomando la palabra. Carlos Menéndez arremetía una vez más contra los socialistas, afeándoles las negociaciones con Junts en Bruselas. “Los únicos obscenos e indignos son los que venden España por siete votos”, ha apostillado el dirigente de Vox en la región, dando pie a una llamada al orden del presidente de las Cortes, también de la formación que dirige en Madrid Santiago Abascal. De este modo, reclamó a los portavoces que dieran un toque de atención a sus miembros para que “se portaran bien” y no insultaran durante el pleno. Así las cosas, el procurador del Partido Popular, Ricardo Gavilanes, ha pedido disculpas a los letrados que asistieron al pleno por el “espectáculo bochornoso” protagonizado por el vicepresidente de Vox.

Gallardo se justifica

Así las cosas, cuando se le concedió el turno de palabra, el vicepresidente de la Junta ha negado “rotundamente” las acusaciones de los parlamentarios socialistas. Rechaza que hubiese realizado un gesto “obsceno”, sino que se limitó a llevarse las manos a la cara simulando un “lloriqueo” para acusarles de “llorones”. Al mismo tiempo, ha calificado de “patética” la estrategia del PSOE para “tapar su gran traición con cortinas de humo”.

"Me dicen que he hecho un gesto obsceno, lo cual niego rotundamente", ha zanjado García-Gallardo, quien ha insistido en que lo que ha hecho es "un gesto de llorar". "Ustedes son unos llorones y es patético, es ridículo, es vergonzoso que quieran tapar la gran traición del Partido Socialista a esta tierra, al Estado de Derecho y a la Unión de España con cortinas de humo", ha relatado.

Así, el vicepresidente ha sido claro ante las movilizaciones en las sede del PSOE en contra de la amnistía y la condonación de la deuda a Cataluña: "No nos van a parar". En este sentido ha asegurado que esta noche estará presente en la movilización que tendrá lugar en la sede socialista de Valladolid. Esta situación ha llevado a que el vicepresidente haya relatado situaciones como en las que el procurador de Ciudadanos, Francisco Igea, "tiraba los papeles" a un procurador de VOX, o en las que el procurador de Unidas Podemos, Pablo Fernández, dice "barbaridades" a los de Abascal.