El alcalde Catoira (Pontevedra), Alberto García, fue denunciado por la Guardia Civil, el pasado 3 de febrero, por saltarse el cierre perimetral decretado para frenar los contagios en Galicia y trasladarse a la localidad de Caldas de Reis.

Alberto García, alcalde socialista desde hace más de 30 años, se refugió en una farmacia cuando vio que los agentes se dirigían hacia él. La maniobra no convenció a los guardias que le esperaron a la salida.

Cuando los agentes le intorrogaron, el alcalde dijo ser consciente de que no podía salir de su municipio debido al confinamiento, pero alegó que había ido a la farmacia. Un argumento nada convincente teniendo en cuenta que en Catoira hay dos farmacias, además de las que existen en otros municipios más cercanos que Caldas.

A una farmacia no entra porque es de su rival del BNG

La razón que dió el alcalde socialista a la pregunta de los agentes de por qué no iba a las farmacias de Catoira fue que a una de ellas no entra porque es propiedad de un opositor político e histórico rival del BNG.

El tono empleado por el alcalde hacia los agentes, según han relatado fuentes conocedoras de lo sucedido a ElPlural.com, dejó entrever una cierta advertencia, al afirmar: "¿Me vas a multar? Tú veras".

Podría enfrentarse a una multa de hasta 3.000 euros

Los agentes finalmente tramitaron la denuncia por una infracción de desobediencia a la autoridad al no haber respetado el cierre perimetral, que podría conllevar una multa de hasta 3.000 euros. La Xunta aprobó recientemente una modificación de la Ley de salud gallega que determina sanciones para los que incumplan la normativa Covid (leves, de 1.000 a 3.000 euros; graves, de 3.001 a 60.000 euros; y muy graves, de 60.000 a 600.000, para reincidentes). La Subdelegación del Gobierno es la que deberá pronunciarse ahora sobre si procede o no la sanción.

Un alcalde polémico 

Alberto García ha sido alcalde de Catoira durante tres décadas y consiguió recuperar el puesto en las elecciones del año pasado tras perderlo en las anteriores cuando el BNG pactó con el PP con tal de sacarlo del poder. La fórmula no llegó a buen puerto y el PSOE maniobró con el PP para presentar una moción de censura contra el regidor nacionalista y cerrar un acuerdo de Gobierno en el que no estuviera Alberto García, que no despierta demasiadas simpatías ni en su propio partido por sus maneras.

Las cosas no salieron bien para los socialistas y Alberto García se votó a sí mismo y consiguió el apoyo de tres de sus ediles, según publicó el Faro de Vigo. Al final, la ejecutiva provincial del PSdeG optó por apoyar su candidatura de cara a las elecciones autonómicas.

La Justicia le investiga por un cobro indebido

El mes pasado, el Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 2 de Vilagarcía abrió diligencias contra el alcalde de Catoira por cobrar 75 euros por día en concepto de asistencia al Ayuntamiento, a pesar de estar en régimen de jubilado.

La situación fue denunciada ante la Fiscalía por el grupo municipal del BNG y su portavoz, Xan Castaño, asegura que entre la numerosa documentación descubierta durante los diez meses en los que los nacionalistas ostentaron la alcaldía figuran los recibís del pago mensual de esta asignación diaria.

Investigado por agresión sexual a una concejala

García fue investigado ya por la Justicia, aunque por otro motivo, cuando fue denunciado por acoso y agresión sexual por una trabajadora municipal y concejala de su grupo de gobierno entre 2007 y 2011. Un caso que fue archivado por el Juzgado de instrucción número 3 de Vilagarcía de Arousa, en 2016.