A Fonsagrada es un municipio lucense que presenta como una de sus principales características la de ser la localidad más extensa de toda la región gallega (438 kilómetros cuadrados). Hasta allí se ha desplazado el máximo responsable de los socialistas gallegos, Gonzalo Caballero, donde se reunió con su alcalde, Carlos López, y con el de Castroverde, Xosé María Arias. El motivo de la visita, tal y como subrayaron desde el PSdeG a través de un comunicado, ha sido para “denunciar el abandono del medio rural” por parte de la Xunta de Galicia.

Según señalaron los socialistas, son “cada vez más” los alcaldes de pequeños concellos que piden “la dimisión del conselleiro de Medio Rural”, José González.

Lo más llamativo de la denuncia planteada por Caballero es que, en la provincia de Lugo, aseguraron desde su formación, “incluso alcaldes del PP, como el de Friol, levantaron la voz” para hacer pública la “ineficiencia” de las políticas que, en materia de medio rural, lleva a cabo el Gobierno regional, reclamando al presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, el cambio del titular de esta Consellería.

En palabras del secretario general de los socialistas, “ya hay alcaldes del PP y del PSdeG que reclaman la dimisión del conselleiro”. Asimismo, añadió durante su estancia en la zona que es necesario otro tipo de política para estos pequeños concellos, así como una estrategia de “discriminación positiva” que promueva la “igualdad de oportunidades” entre toda la cidadanía con independencia del lugar en el que residan.

Desde hace algunas semanas, la moratoria concedida por la Xunta al eucalipto sigue generando controversia. Por eso, aprovechando su visita a A Fonsagrada, Gonzalo Caballero también se refirió a lo que considera “ausencia de gestión forestal” del Ejecutivo autonómico.

En este sentido, habló de “mala planificación”, por parte del equipo de Feijóo, una acción política que provoca “efectos perversos” para municipios como los lucenses en los que estuvo hoy.

Con respecto a esto, el líder de los socialistas señaló que “Galicia no puede ser un eucaliptal”, al tiempo que instó al Gobierno regional a que busque el consenso para ordenar y equilibrar las plantaciones. “No tiene sentido que haya zonas de Galicia masificadas con un 90% de eucaliptos y que en otras estén completamente prohibidos”, agregó.