El Gobierno de Mas ya ha recibido 1,039 millones del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), con el que prometió hacer frente a estos impagos. Sin embargo, las facturas todavía siguen pendientes. El pasado 10 de octubre, el portavoz del Govern, Francesc Homs, anunció que la Generalitat había pedido prestados 410 millones de euros más al FLA, con lo que la petición del ejecutivo catalán suma ya 5.433 millones de euros. En su comparecencia indicó que "no hay fecha concreta" para pagar a las farmacias el dinero que se les debe.

Esta indefinición ha sido la gota que ha colmado el vaso y los farmacéuticos catalanes, hartos de la "asfixia" a la que les somete el Govern, irán a la huelga. Será la primera vez que se organiza una movilización de estas características en Cataluña.

Hay ya dos farmacias que se han visto obligadas a liquidar por mandato judicial, varias están en concurso de acreedores y otras siete han pedido el cierre voluntario. "Las farmacias no somos empresas que facturamos 100 millones al mes. Somos pequeños autónomos que respondemos con nuestro patrimonio", aclaró Dalmases.