Para el Gobierno de Castilla-La Mancha, las últimas ayudas aprobadas en Consejo de ministros por valor de 100 millones de euros para el reparto de menores inmigrantes son insuficientes. El ejecutivo se escuda en que no es una cifra que garantice que el servicio que se preste a los 692 que le corresponden a Castilla-La Mancha sea de calidad y con unas “condiciones dignas”.

“Siempre hemos dicho que tenemos un modelo de acogida que responde a unas condiciones de dignidad para esos menores que no puede cumplirse con modelos de masificación como en algún momento se planteó”, aseguraba la consejera portavoz, Esther Padilla, defendiendo que Castilla-La Mancha siempre se mantendrá solidaria y predispuesta a acoger a los menores inmigrantes, eso sí, si vienen acompañados de financiación.

Son menores que necesitan del acompañamiento permanente de profesionales y la dotación, no solo de un techo, sino también de infraestructuras y de profesionales que atiendan a esos menores”, defiende Padilla, que afirma que la dotación de ayudas de 100 millones eran solo para las comunidades autónomas que se consideraran sobredimensionadas y que Castilla-La Mancha no es una de ellas: “Además es un descenso importante de la financiación por plaza que veníamos recibiendo hasta ahora. O sea, no solo no es suficiente, sino que en este caso se reduce lo que venimos recibiendo”.

Padilla recordaba que el gobierno de Castilla-La Mancha ya impuso un recurso ante el Tribunal Constitucional sobre el reparto de menores, que fue admitido a trámite, por la misma problemática, la falta de financiación. Esa falta de financiación supondría ofrecer un modelo por debajo del que actualmente oferta Castilla-La Mancha, basado en unas condiciones dignas, y que dice Padilla, seguro que desde el gobierno central comparten.

Además, ha señalado que el compromiso con la solidaridad está asegurado y ha puesto como ejemplo que el pasado 15 de agosto, la consejería de Bienestar Social trasladó al gobierno de las Islas Canarias la posibilidad de acoger a 10 menores inmigrantes, ya que los medios de Castilla-La Mancha disponían de plazas. Hasta el momento esas plazas no se han cubierto, pero para Padilla es una muestra de la solidaridad y el compromiso del gobierno regional.