Cualquiera diría que la Santísima Virgen de la Peña, patrona de Mijas, ha venido a ver al joven alemán de 23 años que permaneció desaparecido durante dos largos días, sin agua ni comida, en una oquedad de difícil acceso y poco visible situada en un paraje lleno de cuevas y simas en los alrededores de la localidad malagueña.

Agentes de la Guardia Civil, con ayuda de voluntarios, lograban rescatar al joven tras una intensa búsqueda tras ser denunciada su desaparición el pasado día 20 por la compañera con la que pasaba unos días de vacaciones en la Costa del Sol. El rescate lo llevaron a cabo por efectivos pertenecientes al Puesto Principal y al Seprona de Mijas.

El joven había dejado su residencia el día anterior por la mañana y desde entonces no había dado señales de vida. Su intención era hacer fotografías de la zona.

Un comunicado del instituto armado ha informado de que se realizaron diversas batidas por numerosos caminos y arroyos con efectivos de la Guardia Civil y personal voluntario, aunque al llegar la noche se tuvieron que suspender momentáneamente las labores de búsqueda.

Cuando las esperanzas de encontrarlo con vida empezaban a disiparse, los agentes escucharon gemidos de una persona que se encontraba a varios metros de profundidad, donde se había precipitado por una pequeña oquedad y de donde no podía salir por sus propios medios.

Los guardias civiles tuvieron que acceder reptando debido a la estrechez de la sima, con varios niveles de profundidad en su interior. En el segundo de esos niveles encontraron al joven, desorientado y muy débil pero fuera de peligro.