Las listas de espera siguen siendo, en el balance de principios de cada año, uno de los principales caballos de batalla en la Sanidad de Castilla y León, que adolece, además, de importantes carencias en atención primaria en el medio rural en la comunidad autónoma más extensa de Europa.

La Consejería de Sanidad del Gobierno de Alfonso Fernández Mañueco presume este lunes de haber reducido en 7 días la demora media estructural para una intervención quirúrgica en los hospitales, que se situó a finales de 2023 en 116 días, señala, frente a los 123 de 2022 o los 144 de 2021, algo que la presidenta de la Asociación Defensor del Paciente, Carmen Flores, califica de ”burla”.

“Se están burlando de los pacientes”

A la espera de la publicación de su Memoria del año recién terminado, Flores considera de “vergüenza ajena” el repaso de la Consejería a sus cifras.

“Aunque fuera verdad”, afirma, “es vergonzoso decir que pacientes a los que se aplaza a 8 meses para ver al especialista, se les baja siete días: ¿se están burlando de los pacientes?”, se pregunta. “Pacientes con patologías que se agravan por la espera en el cien por cien de los casos, amén de los que se quedan sin trabajo o llegan a la intervención cuando no se puede hacer nada por el retraso. Una burla en toda regla”, concluye.

“Si pagaran su responsabilidad con fuertes sanciones, cuidarían muy mucho de que la inversión subiera y se potenciaran atención primaria y medios humanos y técnicos”, añade la presidenta de la Asociación.

Un 7% más de entradas en listas de espera

El balance de listas de espera de la Gerencia Regional de Salud difundido por Sanidad Castilla y León, a fecha 31 de diciembre de 2023, publicado en el Portal de Salud, señala que “el esfuerzo realizado por los hospitales para reducir las demoras tiene mayor relevancia si tenemos en cuenta que el número de entradas en lista de espera fue un 7 % más que en 2022 (9.616 pacientes más)”.

El año pasado, recoge el balance, se realizaron aproximadamente 143.000 cirugías programadas en el quirófano (sin contar intervenciones urgentes ni actividad fuera de quirófano).

Así, ocho de los catorce hospitales de Sacyl tienen demoras por debajo de los 80 días, y sólo tres registran cifras superiores a la media autonómica, datos que, afirma la Consejería, “revelan el esfuerzo realizado por los gestores y los profesionales de la sanidad pública de Castilla y León para alcanzar el objetivo previsto de actividad quirúrgica en 2023”.

2.000 pacientes menos en espera para cirugía

En concreto, el número de pacientes en espera estructural para una cirugía se ha situado al acabar 2023 en 31.856, frente a los 33.967 del mismo periodo del año anterior (un 6,2 % menos), destaca Sanidad Castilla y León.

Por especialidades, están en espera de cirugía torácica 63 personas, otras 84 esperan para cirugía cardiaca y 109 para dermatología, mientras que las áreas que se llevan la palma de la demora traumatología, con 10.893 pacientes, cirugía general y de aparato digestivo con 5.903 y oftalmología con 4.434 pacientes en espera.

Por diagnósticos, los cuatro procesos con mayor número de pacientes en espera de intervención a 31 de diciembre de 2023 han sido cataratas (3.400), hernia inguinal (1.656), artrosis de rodilla (1.563) y deformaciones adquiridas de los dedos (1.411 pacientes).

Nivel 1 con demora media de 11 días

En cuanto al criterio de prioridad para ser intervenido, el cien por cien de los 817 pacientes registrados en el nivel 1, es decir, con indicación de ser operados antes de 30 días dada su patología, estaba a final del año pasado dentro del rango y con una demora media de 11 días.

En prioridad 2 (máximo idóneo de 90 días para pasar por quirófano) había en la fecha analizada un total de 5.367 pacientes, con una demora media de 116 días. En prioridad 3 (plazo hasta 180 días, los casos menos urgentes) se han registrado 25.672 pacientes en lista de espera, con demora media de 120 días.

89 días de espera para consultas externas

En cuanto a demoras para una consulta externa hospitalaria, la media estructural se situó en 89 días (95 en 2022), con nueve hospitales por debajo de esa cifra.

El global de pacientes en espera estructural para una primera consulta externa asciende a 192.747 en el periodo considerado (211.862 en 2022), 19.115 menos lo que supone una reducción del 9 %.

64 días para TAC, 85 para mamografía

En cuanto a la demora media estructural de las pruebas diagnósticas que se analizan cada trimestre, los datos a 31 de diciembre de 2023 arrojaban 64 días para un TAC (75 el tercer trimestre de 2022), 73 para una resonancia magnética (92 el tercer trimestre de 2022), 104 días para una ecografía (113 el tercer trimestre de 2022) y 85 días para una mamografía (116 el tercer trimestre de 2022).

Por lo que se refiere al número de pacientes en espera estructural para una técnica, en el caso de un TAC suman 3.024 en el periodo considerado; 2.757 para una resonancia magnética; 10.887 para una ecografía; y 681 pendientes de una mamografía.