Es una tendencia imparable. Una corriente a la que cada vez se suman más países. El futuro de la energía que va a separar a las naciones que apuestan por ella, mientras se distancian de las que mantienen las estructuras antiguas. La energía fotovoltaica no es el futuro. Es el presente de mucho países en los que ya es la primera fuente energética.

Primera fuente de energía en Reino Unido

El último país en unirse es el Reino Unido. En la actualidad, la energía producida por el Sol es ya su primera fuente energética. El impulso que ha recibido en los últimos años ha tenido un espectacular efecto. Sobre todo en los últimos meses, en los que la apuesta solar ha tomado la delantera a la obtenido a partir del carbón. Actualmente, la fotovoltaica ofrece el 5,4% del mix energético británico, frente al 4,7% originada en las centrales de carbón. Los datos han sido ofrecidos por la organización Carbon Brief. Confirman una tendencia que ya ha provocado el cierre de tres centrales de carbón. Y se espera que en 2030, Reino Unido esté libre de producción de este tipo de energía.

Continua bajada de precio

El aumento de generación limpia viene de la mano de la bajada de coste. La energía solar y eólica continua su descenso de precio. Carbon Brief estima que en 2020 será la más barata, superando incluso al gas. Y es que la media de descenso anual de precia es espectacular, rozando el 20% cada año. Para el portavoz de la Asociación de Comercio Solar (STA en sus siglas en inglés) estima que se trata de “un hito importante en el camino de las energías renovables. Un testimonio de la efectividad que la industria solar británica ha tenido en la instalación de esta energía limpia y fiable. Y el trabajo se ha traducido en un aumento de su aportación y una drástica reducción de sus costes”.