Mientras los niños, y no tan niños, de Occidente toman las calles buscando pokémons, otros de diferentes partes del mundo, no tan lejanas, se juegan la vida solo por cruzar de acera.

Un 27% de los muertos, menores

Es el caso de los niños de Siria. Se estima que el 27% de los más de 400.000 muertos que lleva el conflicto civil sirio son menores. Por no hablar de los miles que se han visto obligados a abandonar sus casas juntos a sus familias y que han perecido en el mar o vagan sin rumbo ni piedad por Europa. Y por supuesto, también está el papel propagandístico que ambas facciones, los fieles a Bashar al Assad y el Ejército Libre Sirio, conceden a los más pequeños, conscientes de que la imagen de un niño atrae con más fuerza las mentalidades europeas y norteamericanas.

Pokémon Go

El último de estos ejemplos lo ha dado el ejercito rebelde. Aprovechando el furor mundial por Pokémon Go, ha hecho posar a varios niños portando imágenes de diferentes personajes del popular juego. Y además, lo ha acompañado de texto que, no faltos de creatividad, relacionan la funcionalidad de la aplicación con la situación de estos chavales. En los carteles, junto a Pikachu o Squirtle, aparecen frases como “Estoy en Siria, ven a salvarme”, “Hay muchos Pokémon en Siria, ven y sálvame” o “Estoy en Idlib, ven por mí”. Todo vehiculado, cómo no, a través de un hashtag #PokémonInSyria. Según los organizadores, la pretensión es denunciar el sufrimiento de los más pequeños, aunque tanto los mensajes como la imágenes de los niños parecen indicar otra cosa. Más se asemeja a otro intento por mover la conciencia de la opinión pública internacional hacia una intervención en el país.