Desde diciembre de 2015 estamos sin Gobierno, y de momento no se le espera. En concreto, llevamos este lunes 233 días desde el 19 de diciembre de 2015 y ya hemos entrado entre los cinco países del mundo que más tiempo han estado sin Gobierno en época de paz.

A la cabeza de este poco honorable ranking se encuentra Bélgica, que en junio de 2010 inició un periodo sin Gobierno que se prolongó durante 541 días. Tras los belgas sigue Moldavia, nación que estuvo 528 días sin un Ejecutivo. El resto del grupo de países elegidos lo forman Camboya con 352 días, e Irak con 289.

La contradicción de Bélgica

La situación del pequeño país europeo, Bélgica, fue muy curiosa. El desgobierno se produjo por la gran división interna del país entre la Comunidad flamenca, la Comunidad francesa y la Comunidad germanófona. Esto y que en junio de 2010 ganó las elecciones la Nueva Alianza Flamenca (N-VA), partido republicano, conservador y que apoyaba la independencia de Flandes, provocó que se hiciese imposible conformar un Ejecutivo.

Pero, paradójicamente, la situación del país no se vio alterada, es más, mejoró su economía y se redujeron los niveles de paro. A finales de 2011 se consiguió formar un nuevo Ejecutivo presidido por el socialista francófono Elio Di Rupo y sin la presencia del ganador Nueva Alianza Flamenca.

La crisis moldava

El pequeño país, antiguo república soviética, situada al sur de Ucrania, tuvo que celebrar hasta tres elecciones y un referéndum fallido para reformar la Constitución antes de conseguir formar Gobierno. Fueron 528 días los que este país estuvo sin Ejecutivo después de las elecciones de abril de 2009 en las que ganó el Partido Comunista, pero sin la mayoría necesaria para formar Gobierno.

En medio de fuertes protestas, en julio del mismo año una alianza de partidos pro europeístas consiguió poner fin al régimen comunista ganando unos nuevos comicios, pero sus continuos intentos de formar Gobierno fracasaron.

En 2010, con un nuevo presidente en funciones tras la renuncia de Vladimir Voronin, en el cargo desde 2001, se intentó reformar la Constitución, pero la participación en su referendo del cinco de septiembre no llegó al 30%.

Al final, con unas nuevas elecciones en noviembre de 2010, los tres partidos no comunistas consiguieron llegar a un acuerdo de Gobierno y elegir el 30 de diciembre al demócrata liberal Vlad Filad como nuevo primer ministro.