Silencio absoluto. Este jueves el director de Informativos de TVE, Julio Somoano, ha hecho como el Consejo de Informativos, los representantes profesionales de la redacción, no hubieran hecho público ayer el comunicado más duro contra un directivo de la televisión pública desde su creación. Un comunicado (que pueden leer íntegro pinchando aquí ) en el que se venía a hablar de José Gilgado como responsable de una "maniobra de intoxicación y manipulación".

José Gilgado. Foto con la que se presenta en su cuenta de Twitter



Negativa a firmar la información por parte de redactores y editor
Los hechos que denuncian los redactores de TVE se produjeron el pasado 14 de agosto, con motivo de la comparecencia en la Audiencia Nacional de María Dolores de Cospedal para testificar ante el juez Pablo Ruz por el asunto Bárcenas. Los redactores que habían estado en el tribunal, conforme a la nota hecha pública por el Consejo de Informativos, elaboraron un texto en el que se daba cuenta de que "según fuentes de la acusación, la declarante aseguró que ella no había negociado la salida de Luis Bárcenas y que “entiende que la negociaron Rajoy y Arenas durante una reunión con el extesorero en marzo de 2010”".

El Director de Contenidos, José Gilgado, que sustituía a Julio Somoano, de vacaciones, intentó entonces que se añadiera, dice el Consejo de Informativos, que "según otras fuentes, Cospedal no ha mencionado ni a Rajoy ni a Arenas". Los periodistas se resistieron a incluir lo que consideraban una intrusión en su trabajo, sin que se les identificaran las fuentes que hacían el desmentido. Pero como Gilgado insistió en su orden de incluir lo que les decía, los redactores reaccionaron negándose a firmar la información. Una postura a la que también se sumó el responsable de la edición del telediario, un hecho sin precedentes.

Somoano justifica el intento de manipulación
La gravedad de estos hechos llevaron a abrir una investigación por parte del Consejo, incluida una serie de preguntas al propio Somoano al regreso de sus vacaciones. Según el informe del Consejo, el Director de Informativos "respaldó la actuación del director de Contenidos y consideró lo sucedido una diferencia de criterio a la hora de identificar una fuente que había solicitado no ser citada. Justificó, además, la decisión de la Dirección en el supuesto valor de la información que esa fuente anónima proporcionaba a los espectadores".

En el documento que hicieron público este miércoles, el Consejo de Informativos recordaba que los estatutos de la propia RTVE "protegen el derecho de los profesionales a trabajar con libertad, sin injerencias internas o externas. Y que, en ese mismo sentido, el Manual de estilo obliga a los profecionales a rechazar cualquier intento de orientar la información". Y concluían pidiendo la dimisión de José Gilgado, o, caso de no producirse, "su inmediata destitución".

Los 'hijos de... Telemadrid'
Como decimos, Somoano no ha reaccionado. Según ha sabido ELPLURAL.COM en fuentes de la redacción, Gilgado es "el poli malo" en la pareja de poder que hace con Somoano, quien se presenta más que como "poli bueno", como "poli bobalicón". "El que aparece cuando hay que mandar cuadrarse y seguir las órdenes de Génova o Ferraz es Gilgado", nos han dicho. Eso sí, la "pareja de polis" es inseparable. Gilgado fue el primer apuntalamiento que se trajo Julio Somoano cuando desembarcó en TVE desde Telemadrid. Los dos eran miembros del peculiar grupo de periodistas que mostraban un perfil psico-político que incluía denominarse 'el lado oscuro de Telemadrid', jugar a ser seguidores de Darth Vader y celebrar públicamente, camisetas incluidas, la elección de Esperanza Aguirre o mostrar su admiración por el conocido periodista ultra Federico Jiménez Losantos.

Julio Somoano y el resto de la 'banda' del 'lado oscuro de Telemadrid'



Al tiempo que hacía público este comunicado pidiendo la dimisión de Gilgado, el Consejo de Informativos también hizo público otro en el que criticaba la información ofrecida en los telediarios sobre el asalto a la sede de la Generalitat en Madrid con motivo de la pasada Diada.  En esta comunicación, el Consejo critica que "un hecho tan grave" se redujera a "veinticinco segundos de imágenes, sin mencionar ni las lesiones ni los daños que provocaron a los asistentes". Además de que se ocultara la "condena de los portavoces políticos", se dice, y de que "tanto el TD2 del 11 de septiembre, como el TD1 y TD2 del 12 y el Informe Semanal del día 14 se omitió el momento en el que el cabecilla ultra agarra la bandera catalana del estrado y la lanza rabiosamente fuera del escenario". El Consejo subraya que "la mayoría de televisiones y medios si emitieron íntegramente ese momento", mientras que "los Telediarios e Informe Semanal citados sí emitieron, a continuación del asalto ultra, la secuencia en la que unos manifestantes encapuchados queman en Barcelona las banderas de España, Francia y de la UE, además de un retrato del Rey".