En julio de 2010 Francisco Álvarez Cascos, que llevaba semanas buscándole para confirmarlo, logró echarse a la cara a Mariano Rajoy. Quería que su viejo compañero -los dos habían sido vicepresidentes de Aznar y llevaban en el partido lustros suficientes como para conocerse más que bien- le confirmara que iba a tener el 'retiro' que buscaba: emular a Fraga y salir de la política nacional presidiendo su 'patria chica'. Asturias en este caso.

"Quiero que seas mi candidato" decían las palabras, pero no los gestos de Rajoy
Muy en el que es su estilo, en esta primera entrevista 'Mariano' despachó a 'Paco' postergando la decisión a un segundo encuentro, semanas más tarde. Pero el presidente 'popular' no sólo dio muestras de escuchar de buen ánimo la petición de su viejo compañero, sino que, también muy en su estilo, le dio a entender que le animaba a competir por el cargo..., aunque sin comprometerse. Cascos, que es hombre de menos sutilezas y conoce a Rajoy, se quedó con la mosca detrás de la oreja.

'Mariano' y 'Paco' cuando aún no había 'desaparecido' Aznar y 'Bárcenas' era un desconocido para el gran público... Los tiempos de 'la inocencia'



Quizás por eso cuando, dos meses más tarde, en septiembre volvieron a verse no acabó de creerse lo que el entonces cada vez más poderoso 'Mariano' le dijo: "Quiero que seas mi candidato". Así de claras fueran las palabras, pero el tono no debió resultar igual de contundente. De hecho, aquel mismo día en el que Rajoy se lo dijo, 'Paco' llamó a varios antiguos compañeros de los dos, viejos miembros del Gobierno de Aznar como ellos, para mostrarles sus dudas y ver si le ayudaban a disiparlas.

"Paco lo es todo, menos mentiroso..., y si él nos dijo que no se fiaba..."
Uno de ellos, según se lo contó a ELPLURAL.COM, le felicitó al escuchar el relato de la entrevista: "lo tienes hecho", nos contó este exministro que le había dicho a Cascos. "Pero Paco desconfió -continuó con el relato-, quizás porque él, al contrario que nosotros (los otros exministros a los que llamaba para contarles), no sólo escuchó sus palabras, sino que también le vio la cara. Y cuando nos dijo que desconfiaba, pues nos entraron a todos las dudas, porque Paco lo es todo, menos mentiroso. Y si él nos dijo que no se fiaba...".

Y a 'Paco' parece que, en efecto, no le faltaban razones para desconfiar, porque muy poco después estalló la batalla interna en el PP asturiano, y desde su propio partido comenzaron a bombardear sin piedad al antiguo exsecretario general, y exvicepresidente, al que le dedicaron lindezas tipo "terrorista callejero". Tanto le dieron, que según nos contó aquel exministro, Álvarez Cascos y sus viejos compañeros volvieron a las elucubraciones, divididos en dos opiniones: "unos pensábamos -nos dijo este viejo compañeros de 'Paco' y 'Mariano'- que la maniobra de Rajoy era “dejar que 'curtieran' a Álvarez Cascos para luego aparecer él y salvarle y decirle “gracias a mí te mantienes al frente del PP en Asturias”, y otros se sumaban a la teoría del propio Cascos que era: “lo que está haciendo Mariano es dejar que me den y me den para luego tener una excusa para dejarme caer diciendo que es que en el partido no me quieren”.

Una dolida carta de 'adiós' que ahora podría tener un inesperado epílogo
Los hechos demostraron que Cascos, y no nuestra fuente, tenía razón. "El 'cabreo' de 'Paco' fue tremendo -siguió contándonos el veterano líder 'popular'-, porque consideraba que 'Mariano' no sólo le había mentido, sino que había habido saña, porque como presidente del partido podía haber evitado la campaña de desprestigio contra él”. En fin, era la guerra..., que ya se sabe cómo acabó, con Cascos creando el partido Foro Asturias, el voto de la derecha dividido, y el PSOE, dos elecciones mediante, en el gobierno del Principado. Todo esto y un enorme rencor, según nos dicen, nada disimulado de 'Paco' hacia 'Mariano'.

En la carta con la que se dio de baja del PP, que dirigió personalmente a Rajoy como presidente del partido y que se puede leer aún en la página de 'Los Genoveses', permite a la vista de los nuevos acontecimientos una interesantes relectura: "Todo ello (la campaña de insultos) no hubiera sido posible sin el consentimiento expreso, cuando no la complicidad, de la dirección nacional del partido que presides, a quien correspondía de oficio atajar estas conductas y velar por el cumplimiento de los Estatutos en todos los ámbitos de la organización", escribió Cascos.  Como se ve, no a otro que a 'Mariano' culpaba de lo sucedido.

Un Cascos sin responsabilidades penales, sin futuro político... y con heridas abiertas
Cascos tragó entonces un veneno del que no ha logrado librarse.., hasta que le llega la oportunidad de hacerlo ahora, cuando resulta, quizás, más peligroso que nunca. Porque cuando se presente en unas horas ante el juez Ruz, irá muy 'ligero' de responsabilidades y muy cargado de rencor. Cuente lo que cuente al juez Ruz en las próximas horas sobre la financiación del PP, Álvarez Cascos, que fue secretario general hasta 1999, estará exento de responsabilidades penales que ya habrían prescrito. Pero es que además, Cascos es un hombre cuyos horizontes en política, más allá de por la edad, por su propia decisión, no existen. Es decir, no tiene 'futuro' en este sentido. O lo que es lo mismo, no tiene 'nada que perder ni que temer'.

Y hay que recordar, por último, que 'Paco', como Javier Arenas, y 24 horas después hará María Dolores Cospedal, acude a la Audiencia Nacional no como imputado, sino como testigo. Lo que quiere decir que no puede mentir en defensa propia, lo que sí podría hacer si compareciera como acusado.

En resumen, no sólo 'Paco' puede servir por fin fría su venganza por lo que le hizo 'Mariano' al no permitirle la salida de la política que soñó, sino que puede además, diciendo la verdad y toda la verdad, evitarse cualquier riesgo de perjurio y verse envuelto en una pelea 'que ya no es suya'.