Iñaki López se enfrenta a una nueva etapa profesional en su estreno como presentador, junto a Cristina Pardo, en Más Vale Tarde. Por ello, en una entrevista concedida a El País, el periodista da las claves sobre la nueva temporada del programa de La Sexta y, a su vez, ha revelado quién es el político que es “un seguro de audiencia” en la televisión.
Ante la pregunta sobre quién es la figura política que más gusta a los espectadores el presentador no lo ha dudado: Miguel Ángel Revilla, presidente autonómico de Cantabria. “He logrado tener una amistad con él. He tenido un desprendimiento de retina y el tío me ha llamado todos los días. Es un fenómeno de masas y, en la tele, un revulsivo, un seguro de audiencia”, sostenía.
A pesar de que el político cántabro ocupa la primera posición de los audímetros según López, el presentador de La Sexta suma otros nombres relevantes, y no solo del mundo de la política, también del espectáculo y de la cultura que también se llevan el beneplácito del público: “Hay otros: Bono, Pérez Reverte, Loquillo, Cristina Almeida y el exministro Margallo. Personas de ideología diferente que crean opinión, arrastran a gente y funcionan como un tiro”, continuaba señalando.
Por otro lado, entrando en la opinión sobre los tertulianos que suelen participar en La Sexta Noche, Iñaki López ha respondido sobre si sus diferentes comportamientos le generan “vergüenza ajena”. El periodista señala que esos momentos "son muy pocos minutos en un programa de seis horas”, apuntando a su vez que los que realmente le provoca esa clase de vergüenza son “los políticos que se echan zascas en la tribuna, o que te mienten a la cara en un programa”, confiesa en la entrevista.
Acto seguido, continuó matizando la actitud que en realidad espera de los representantes políticos recordando alguna que otra anécdota al respecto: “No les pido que acierten siempre, sino responsabilidad y que te digan la verdad. Y no, te mienten a la cara. Yo he tenido de tertuliano a Francisco Granados, le he preguntado por su inocencia, me ha mentido y me lo he tragado. Una semana después estaba en la cárcel. Granados, no yo”, sentenciaba.
