El pasado sábado, 15 de febrero, Javier Milei promocionaba una criptomoneda, que ayudará a "incentivar el crecimiento de la economía argentina", cuyo valor desapareció casi por completo al rato de su salida. Y es que, se trataba de una estafa piramidal que hizo que más de 40.000 personas perdieran su dinero. Días más tarde, La Revuelta de Broncano se reía del presidente argentino creando una moneda virtual de Pedro Sánchez.
El encargado de llevarlo a cabo fue Jorge Ponce, que irrumpía en el escenario del Teatro Príncipe de Gran Vía para dar paso al sorteo de la Lotería. El colaborador aseguraba que llegaba con un encargo de las altas esferas en esta ocasión: "Me han encargado del Ente que tengo que dar un mensaje del Gobierno. Me han dicho 'aprovecha Loterías que la gente lo ve mucho, y da el mensaje que tenemos que dar".
Entonces, la doble pantalla aparecía como cada noche y mientras que en un lado Sandra Daviú cantaba los números premiados, en el otro, Ponce aparecía juntos a imágenes de criptomonedas o memes famosos, como el del conocido como 'Swole Doge', en la que se exagera a un can con cuerpo humano, dándole una nueva vida al 'Doge', un meme de 2013 en el que un perro aparece con cara de sorpresa.
El programa colgaba posteriormente el vídeo en su cuenta de X -anterior Twitter- en el que se escuchaba como el colaborador promocionaba una criptomoneda con la cara de Pedro Sánchez: "Llegó el momento. Estoy realmente orgulloso de poder comunicaros al fin el lanzamiento oficial de la Doggycoin, la criptomoneda oficial del presidente del Gobierno", arrancaba con sorna.
Continuando con este tono, Ponce añadía: "Podéis entrar desde hoy mismo en este negocio lucrativo, fiable y sobre todo libre a partir de 3,25 dólares el token. Un producto desvinculado de los mercados tradicionales que como veis tiene este nivel de previsión" y que "basa su crecimiento en los índices de confianza de los principales gimnasios de crossfit y sus correspondientes hilos de Forocoches", decía, mientras en pantalla se mostraban distintos gráficos y los memes mencionados.
Para continuar 'vendiendo' esta criptomoneda, el malagueño anunciaba que "obteniendo la Doggycoin te llevarás la perra gorda que te permite entrar en un sorteo de un paseo en el falcón acompañando a Begoña a pilates". "Nosotros ya hemos invertido ¿y tú a qué esperas?", finalizaba el sketch, mientras que en pantalla se mostraba una imagen con algunos miembros del equipo.
Pedro Sánchez nos obliga a contar esto 🪙
— La Revuelta (@LaRevuelta_TVE) February 17, 2025
¿Está bien así, Pedro? ¿Lo hemos contado bien? El guion que nos llegó era el v2_doggycoin_ok pic.twitter.com/PN51IfStjc
Milei engañó a más de 40.000 seguidores
Javier Milei promocionó el sábado, a través de su cuenta de X, una criptomoneda virtual con la promesa de que contribuiría a "impulsar el crecimiento de la economía argentina". Sin embargo, el tuit fue eliminado posteriormente al descubrirse que se trataba de un esquema Ponzi (estafa piramidal). El presidente argentino aclaró: "Hace unas horas publiqué un tuit, como tantas otras veces, apoyando un supuesto emprendimiento privado con el que obviamente no tengo vínculo alguno", y agregó que "no estaba al tanto de los detalles del proyecto, pero tras informarme decidí no seguir difundiéndolo". A pesar de que se retractó, lo cierto es que más de 40.000 seguidores ya habían caído en la trampa.
La criptomoneda en cuestión, llamada $Libra, es un ejemplo típico de lo que se conoce como moneda meme: una criptodivisa recién creada sin respaldo tangible, cuyo valor depende exclusivamente del entusiasmo colectivo generado por una figura, evento o fenómeno en línea. Este tipo de activos carecen de fundamentos sólidos, lo que los convierte en productos altamente volátiles y de riesgo. Aunque algunas monedas de este tipo han tenido éxito, como la $Trump, que recaudó 40.000 millones de dólares en un solo día, el caso argentino no siguió esa tendencia. Tras la difusión del mensaje de Milei, el valor de $Libra alcanzó los 4,7 dólares en pocos minutos, pero cinco horas después sufrió un desplome, cayendo a 0,19 dólares, producto de una intensa especulación que encendió todas las alarmas.