Ya son las ocho, el programa de Sonsoles Ónega se encuentra en el ojo del huracán por lo que se ha podido ver en directo este martes. El magacín contó con la colaboración de la periodista María Jamardo y sus palabras a la hora de comentar la histórica declaración del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, en el Congreso se han convertido en noticia.

Y es que desde que pronunció las palabras, las acusaciones de "apología del nazismo" y de "blanqueamiento del fascismo" no paran de sucederse e inundar las redes sociales en contra del programa de las tardes de Telecinco.

En el ejercicio de libertad de expresión del programa, la tertuliana criticaba duramente la alusión que Zelenski hacía apenas unas horas antes al bombardeo de Gernika de 1937, de la que dijo que era una de las mayores atrocidades de la Guerra Civil española cometida a mano de los nazis. Una referencia con la que el político quiso equiparar este hecho que está en la memoria de todos los españoles con la matanza y el genocidio que se acaba de descubrir recientemente en Bucha (Ucrania) y que ha cometido el ejército ruso.

"Quería matizar esa alusión al bombardeo de Gernika. Me ha parecido mal porque hay que recordar que en aquel momento el comunismo y el partido socialista tenían el apoyo de Stalin. Entonces, ni el que bombardeaba era bueno ni los bombardeados eran tan buenos tampoco. O ni el que bombardeaba era malo ni los bombardeados eran tan buenos", indicaba Jamardo al respecto ante el silencio de los compañeros en el plató.

Unas palabras las de la periodista que no han sido frenadas ni por el resto de participantes de la mesa de debate ni mucho menos por Sonsoles como moderadora al ejercer de presentadora. Precisamente, que no hubiera una respuesta automática a semejante "barbaridad" vista en pleno directo ha sido lo que ha incendiado a los espectadores. Multitud de usuarios anónimos y famosos, entre ellos rostros televisivos y compañeros de profesión, han cargado sin miramientos contra el formato de Telecinco.

Tanto es así, que muchos han llegado a pedir un boicot al programa, que además no pasa por su mejor momento. "Estaría bien publicar una lista de anunciantes y patrocinadores del espacio que dé voz a esta miserable fascista. Un boicot masivo a las marcas que patrocinen a esta gentuza", escribía un espectador. "Pero cómo puede ocurrir que se diga semejante indecencia en televisión y no haya una respuesta automática por parte de Telecinco?", se preguntaban sin dar crédito a lo sucedido.