Semanas antes de su regreso a la pequeña pantalla gracias a 'Supervivientes 2024', Jorge Javier Vázquez ha sido víctima de una estafa a través de las redes sociales. Un engaño del que no ha sido el primer objetivo ni tampoco será el último, y es que, cada vez son más las cuentas que utilizan las imágenes de personajes famosos para motivar el click de la audiencia y engañarles.
El escenario no ha sido otro que la red social X, conocida anteriormente como Twitter. Un perfil utilizaba una vieja instantánea del presentador catalán en su visita al antiguo programa de Andreu Buenafuente en Movistar Plus+, 'Late Motiv', en el año 2018. En ella se puede ver a Vázquez sujetando enseñando la pantalla de su teléfono móvil a cámara, en la que se puede ver la aplicación de un banco. La fotografía se encuentra promocionando un enlace en el que se puede leer: "Jorge muestra su secreto al público".
Pero, además, todo ello se encuentra enmarcado dentro del siguiente tuit: "Jorge pensaba que podía decir lo que pensaba, pero ahora se enfrenta a la posibilidad de perderlo todo". ¿Qué es lo peor de esta práctica? Estos tuits provienen de cuentas que, en su inmensa mayoría, se encuentran verificadas y que pagan en la red social, sin ningún tipo de control, para llevar a cabo publicaciones promocionadas.
Jorge Javier Vázquez no ha sido el único en sufrir estas prácticas a través de redes sociales. Las imágenes de otros famosos como los actores Antonio Banderas o Martiño Rivas o la cantante Lola Índigo también circulan por la aplicación sin ningún examen. "Intriga en estado puro. Desvelado el secreto de cuánto gana un actor", acompaña a un enlace con la cara del actor malagueño.
El regreso de Jorge Javier Vázquez a Telecinco
Casi seis meses después de su retirada de Telecinco -tras la cancelación del fugaz 'Cuentos Chinos' en access prime time- Jorge Javier Vázquez regresa a la cadena para ponerse al frente de las galas de 'Supervivientes' una vez más. Tal y como él mismo recordaba hace unos días en su blog de Lecturas, este mes de marzo se cumplen 21 años de su llegada a Mediaset, coincidiendo con esta nueva etapa que está a punto de enfrentar: "He vivido una época mágica en la empresa durante la cual he pasado más tiempo en ella que en mi casa. Y después de veintiún años trepidantes vuelvo a la casilla de salida. Todo está por escribir. O quizás aquí ya solo nos quede el epílogo. Así de loco es nuestro mundo. Por eso es tan apasionante".
Por ello, el catalán ha confesado qué ha sido lo mejor de volver a las instalaciones de Fuencarral: "Sin lugar a dudas, el reencuentro con los compañeros que la hacen. Redactores, cámaras, directivos, maquillaje, peluquería. Volver a ver a Joaquín Prat por los pasillos, conocer a César Muñoz, coincidir con Frank Blanco, cotillear con Marta Flich. Qué bien me lo pasé grabando con Laura Madrueño, Carlos Sobera y Sandra Barneda, que está mejor que nunca. Divertida, risueña. Me reconcilié con Eva Espejo, la directora de ‘Fiesta’, y la desbloqueé ese mismo día de mi WhatsApp".
Por otro lado, el presentador ha hablado del camerino que nunca tuvo pese a su papel protagónico en Mediaset: "Antes de la pandemia yo no tenía camerino. Me cambiaba en la sastrería que hay enfrente del plató de ‘Sálvame". Sin embargo, todo esto cambió debido al coronavirus y, "por cuestiones de protocolo", le asignaron uno en el que le "dejaban la ropa preparada antes de que llegara". Ahora, el camerino cuatro ha dejado de llevar su nombre y será complicado que vuelva a hacerlo: "¿Qué pretendía? ¿Que me guardaran ausencia? El cuatro fue mi camerino pero ya no lo es y dudo que vuelva a serlo porque con ‘Supervivientes’ solo iré una vez por semana. Lo normal es que me asignen uno que esté libre esa noche".
Además, Vázquez también ha visitado el plató que tantas veces le aplaudió, el de 'Sálvame', que ahora acoge las tardes de Ana Rosa: "Demasiados sentimientos encontrados", ha reconocido. El presentador se abría en canal ante sus lectores y no dudaba en escribir sus reflexiones tras la visita: "No tuve escapatoria. Tras unos momentos de lógico desasosiego casi se me olvida recordar que pasé ahí catorce años de mi vida. Así es la televisión y así hay que aceptarla. El camerino fue mi camerino durante un tiempo pero no me pertenecía. Lo mismo que el plató".
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