Ion Aramendi no ha tenido reparos para hablar sobre su etapa como reportero hace años atrás en Sálvame, de la que recuerda que tuvo alguna que otra “situación desagradable”. Ahora, que ha vuelto a ser parte de la familia de Mediaset, ha rememorado viejos tiempos.

En una entrevista concedida a Rosa Villacastín en la revista Diez Minutos, el que fue presentador de TVE se sincera sobre su fichaje en el aclamado programa de Telecinco. “Cuando me presenté a un casting ni siquiera sabía que era para Sálvame. No soy un periodista vocacional, no sé por qué estudié esta carrera, pero cuando me llamaron hice un par de vídeos parodia, movilicé a mi familia y colegas para que me votaran y quedé el tercero, y me cogieron como reportero”, recuerda.

Aramendi dedicó ocho años de su vida profesional a trabajar en el programa encabezado por Jorge Javier Vázquez, desde 2009 a 2016, cuando dio el salto como presentador en ETB: “Perdí el miedo a la cámara, aprendí a contar en un minuto y medio la historia que quieres narrar”.

No obstante, sí que recuerda algunos episodios en los que sufrió trabajando, a pesar de que matiza que en el programa son “superprofesionales”. Es así como confiesa las “situaciones desagradables” que vivió a pie de calle: “Siempre que intentaba abordar a Cayetano Martínez de Irujo me generaba mucha tensión, porque en cuanto le lanzaba una pregunta sobre Genoveva Casanova o la duquesa de Alba me soltaba una grosería. (…) Me costaba mucho preguntarles por su vida, más si eran infidelidades”, revela.

Aramendi alaba el “periodismo de corazón”

En otro orden de ideas, y con su regreso a Mediaset como uno de los conductores de las galas de Supervivientes 2022, Ion Aramendi espera quedarse muchos años más. “Estoy encantado con el trabajo que hago en Telecinco, el cariño que estoy recibiendo por parte de mis excompañeros”, asegura.

Asimismo, y en relación con las múltiples y continuadas críticas que recibe Sálvame por la clase de contenido que ofrece, el presentador se muestra tajante: “Defiendo el periodismo de corazón, es muy profesional. En el caso de Sálvame, no sabes el trabajo que hay detrás de las cámaras, en la redacción y en la calle. Llenar de contenido cuatro horas diarias de programa es un trabajo increíble y me da pena que no se valore”, lamenta a modo de conclusión.