La labor de los reporteros cubriendo la guerra de Ucrania se ha vuelto esencial en el conflicto de la invasión rusa. Alberto Sicilia, reportero de Al rojo vivo, está cubriendo la invasión desde Kiev; donde ha sido interrumpido en directo por el lanzamiento de un misil antiaéreo. 

El periodista conectaba en directo con Antonio García Ferreras para informar de la situación que están viviendo en la capital ucraniana, después de que hubiese un bombardeo en un centro comercial, donde ha habido, al menos, un total de ocho víctimas mortales. Cuando comenzaba el directo, Sicilia escuchaba un estruendo y se tapaba la cara para mirar el cielo. "Perdona, que han lanzado ahora un misil antiaéreo", decía el reportero nada más escuchar el ruido. 

Alberto Sicilia continuaba con la retransmisión en directo con total normalidad, lo que Ferreras le preguntaba por la naturalidad con la que el reportero continuaba con la labor de la crónica que estaba realizando. Sicilia explicaba que esa misma mañana habían sonado bastantes y que una batería antiaérea debía estar muy cerca de la zona donde él se encontraba, ya que en un intervalo de media hora lanzaban ese misil. "Es muy difícil entender que estén cayendo aquí estos misiles", señalaba el periodista.

Un centro comercial vacío para guardar misiles 

El Ministerio de Defensa ruso ha reconocido este lunes el ataque sobre un centro comercial de Kiev, pero ha asegurado que estaba vacío y que era utilizado como base para un vehículo lanzamisiles MLRS y para almacenar munición y proyectiles autopropulsados. Ucrania ha denunciado al menos ocho muertos en el ataque y el uso de munición prohibida por parte de Rusia.

Como consecuencia del ataque no solo ha quedado destruido este centro comercial, sino que también las viviendas de alrededor y los vehículos de un aparcamiento adyacente han quedado dañados.

"Unidades nacionalistas ucranianas han ocupado durante días edificios residenciales del barrio Vinohradar de Kiev para disparar contra militares rusos utilizando lanzamisiles", ha afirmado el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, el general Igor Konashenkov, citado por la agencia de noticias rusa TASS.

Rusia atacó el centro comercial en la noche del 20 de marzo con armas de precisión de largo alcance tras obtener las coordenadas a través del servicio de Inteligencia.

Konashenkov ha denunciado el "uso de zonas residenciales como escudos humanos" para proteger las baterías de artillería ucranianas y disparar contra las fuerzas rusas.

Konashenkov ha emplazado a la prensa occidental a tomar nota del contenido de unos vídeos que ha presentado que demostrarían "claramente" cómo el lanzamisiles MLRS entraba dentro del centro comercial "para refugiarse tras un ataque y para recargar sus misiles".