El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha asegurado que solo aceptarán un ultimátum ruso cuando todos hayan muerto, en respuesta al plazo puesto por Moscú para que los combatientes ucranianos de Mariúpol abandonaran la ciudad.

"Ucrania no puede cumplir jamás un ultimátum de la Federación Rusa. Tendríamos que estar todos muertos y solo entonces se cumpliría su ultimátum para entregar Járkov, Mariúpol o Kiev. No podemos hacerlo", ha afirmado Zelenski en una entrevista con prensa europea.

Este domingo, Moscú anunció una propuesta de evacuación para Mariúpol, rodeada por fuerzas rusas, que incluía que los combatientes dejaran las armas y a cambio tuvieran paso libre hacia territorio controlado por el Ejército ucraniano. El Gobierno de Ucrania ha anunciado que se subvencionará con al menos 2.000 grivnas mensuales -más de 60 euros- a aquellos ciudadanos que abandonan sus domicilios huyendo de zonas activas de conflicto con el Ejército ruso.

El primer ministro ucraniano, Denis Shmigal, ha explicado durante una rueda de prensa que esta subvención se llevará a cabo "sin papeleo" y "sin burocracia", simplemente con una transferencia bancaria a "todos aquellos que se han mudado de áreas de hostilidades activas".

Además, se abonarán hasta 3.000 grivnas -más de 92 euros- por cada niño que se haya visto obligado a desplazarse dentro del territorio ucraniano, según recoge la agencia de noticias Ukrinform.

Continúan los ataques rusos

Por otro lado, el primer ministro ha denunciado los últimos ataques del Ejército ruso que, entre otros, habrían tenido como objetivo un museo en Mariúpol -donde al parecer se refugiaban civiles- o un asilo de ancianos en Lugansk, a la par que ha informado de que en Sumy "los ocupantes lanzaron una granada contra civiles".

Además, Rusia ha planteado como condición para detener su ofensiva militar el reconocimiento de la anexión de Crimea por Rusia, la independencia de Donetsk y Lugansk y la neutralidad de Ucrania. Esta última propuesta, la renuncia al ingreso en la OTAN, es la única que aceptaría Kiev.

Por otra parte, el presidente ucraniano ha pedido este lunes a Europa cerrar todos los puertos a los barcos rusos y ha defendido que "nadie tiene derecho a destruir el continente". En un mensaje a la nación, el mandatario ha instado a todos los europeos, y en especial a los alemanes, a ejercer una mayor presión sobre Rusia por la invasión de Ucrania. "Es necesario cerrar todos los puertos europeos e impedir que distribuyan sus productos, además de abandonar los recursos energéticos rusos", ha dicho.