La periodista Maribel Vilaplana, la persona que estuvo con el ya expresidente de la Generalitat, Carlos Mazón, comiendo en El Ventorro duarante cuatro horas el día de la DANA ha declarado que ella tenía el teléfono silenciado, pero que el entonces presidente no paraba de recibir llamadas y de enviar WhatsApp, pero que pese a todo "actuaba con total normalidad" pese a que Valencia estaba viviendo el peor día de su historia.

Un día que acabó con 229 personas fallecidas. La periodista no ha dejado de llorar durante su declaración, asegurando que se ha sentido "muy utilizada", incluso ha narrado que perdió a un amigo en la DANA, y que no pudo ni ir al funeral.

Con respecto al ticket del parking al que la acompañó Mazón cuando saieron de El Ventorro, Vilaplana ha aseverado a preguntas de la magistrada Nuria Ruíz Tabarra, que no lo conserva. Del hecho de que la acompañara ha recoger el coche, ha contado que estuvieron un rato hablando en el aparcamiento, pero no ha sabido precisar cuánto tiempo. Que estaban hablando del Levante CF porque ella le pidió que se impicara más con el equipo y fuera a un partido.

La periodista ha explicado que no escuchó las conversaciones que Mazón mantuvo por teléfono porque éste se levantaba de la mesa y se apartaba para hablar. Además, también ha dicho que está acostumbrada por su trabajo a mantener comidas con gente importante y con cargos altos, y que cuando hablan por teléfono ella se abstrae.

También a preguntas de la juez ha asegurado que en ningún momento Mazón pronunció las palabras "DANA, lluvias o Cecopi", y ha añadido que como en Valancia no llovía "no tenía percepción de que estuviera pasando nada". Durante la comida, el dueño del restaurante le subió a Mazón un sobre con papeles que Vilaplana asevera que el presidente firmó.

Uno de los puntos calientes de la declaración ha sido cuando ha contado que Carlos Mazón se cambió de ropa en el restaurante, pero ha precisado que no lo hizo en su presencia. De hecho ha dicho: "Luego la prensa dirá que se cambió delante de mí".

El vídeo

En cuanto al vídeo de la inundación que recibió en un grupo familiar, Maribel Vilaplana ha asegurado que lo mandó su exmarido pero ella no lo abrió. De hecho ha dicho: "Me atormenta no haberlo abierto". Entre lágrimas ha aseverado: "Algún día podré respirar, dejar de tener pesadillas". "Yo soy una consecuencia fatal, no sabe lo que me duele que las víctimas piensen que voy de víctima. Es fundamental que las víctimas sepan que me duele en el alma", ha apostillado. 

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