Debido a la masiva oleada de positivos a causa de ómicron en esta sexta ola, la detección de casos se reforzó gracias a los test de antígenos disponibles en farmacias. En el último acuerdo alcanzado por las comunidades autónomas y el Ministerio de Sanidad, aprobado por la Comisión de Salud Pública, todas las consejerías deberían notificar obligatoriamente los positivos detectados por pruebas de autodiagnóstico, cifras que posteriormente se suman al informe epidemiológico diario del sistema nacional.

Esta cuestión la ha matizado este miércoles la ministra Carolina Darias tras el Consejo Interritorial de Salud en la rueda de prensa posterior. "Hemos reiterado ante las comunidades autónomas la obligatoriedad de notificar todos los positivos de acuerdo con la estrategia de vigilancia acordada el 30 de diciembre del año pasado"; de la misma manera, ha indicado la necesidad de esta metodología porque los positivos también deben "constar en el historial clínico de los pacientes".

Esta mecánica ha sido adoptada por casi todas las autonomías, exceptuando el caso de la Comunidad de Madrid y Andalucía. En el caso de la primera, ha admitido a ElPlural.com que no han contabilizado todos los positivos de la sexta ola debido a que continúan depurando todos los datos para evitar una confusión con los detectados por PCR. Asimismo, también han adelantado que, en cuanto este proceso finalice, facilitarán dichas cifras al sistema nacional. En el caso de Andalucía, sostienen que en el sistema de vigilancia epidemiológico porque se prioriza las PCR a enfermos graves y colectivos vulnerables.

Importancia de la tercera dosis contra el virus

La titular de Sanidad también ha querido recordar ante los medios de comunicación la importancia de la campaña de vacuanción y cómo con ella se han evitado miles de hospitalizaciones y muertes. En el escenario actual en el que se encuentra España, la inoculación de terceras dosis a la población es el principal objetivo a cumplir.

"La vacunación continúa mejorando considerablemente, tenemos la pauta completa en mayores de 12 años está en el 90,6%; mientras que el 88% de los mayores de 60 años ya tienen una dosis de refuerzo". Igualmente, el 46% de los niños de entre 5 y 11 años ya cuentan con su primer pinchazo.

Asimismo, Darias ha querido insistir en la importante minimización de riesgos gracias a la vacuna: "Los grupos de 40 a 59 años, con un porcentaje menor de refuerzo, lo que requeriría una aceleración en estos grupos de edad. Es importante, las vacunas salvan vidas, nos protegen frente a enfermedad grave, hospitalización, UCI y muertes", ha afirmado apoyándose en los datos oficiales.

"Una persona entre 60 y 79 años vacunada tiene 16 veces menos probabilidad de hospitalizar, 19 menos de ir a UCI y 20 menos de fallecimiento. A pesar del altísimo nivel de pauta vacunal, tenemos que perseverar en aquello que sabemos que funciona: seguir vacunando", exponía.

"Los datos son contundentes. Una tercera dosis nos eleva mucho a los porcentajes de protección frente a delta u ómicron. Más allá de esto iremos viendo", explicaba para finalizar al ser preguntada por la inoculación de una cuarta dosis, la cual ya se ha aprobado para las personas inmunodeprimidas.