Violencia de género, agresiones físicas o sexuales, discriminación o prácticas culturales como la mutilación genital femenina, son sólo algunas de las realidades a las que se enfrentan diariamente millones de mujeres en todo el mundo.

Si miramos únicamente en nuestro país, España se ha convertido en el país con mayor demanda de sexo pagado en toda Europa y en uno de los primeros a nivel mundial.

Los datos son estremecedores pues el 39% de los españoles reconocer haber pagado, al menos en una ocasión, por servicios sexuales. Hablamos principalmente de varones de entre 35 y 55 años, según los estudios de la Asociación de Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituída (APRAMP), editados por el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad, en el año 2016. Menos de una década antes (en 2007), un informe elaborado por la Comisión Mixta del Congreso y el Senado aseguraba que en España hay 15 millones de hombres clientes potenciales de prostitución.

A España, le siguen Suiza, donde el 19% de los hombres han pagado por sexo; Austria, con un 15%; Países Bajos, donde son el 14% y Suecia, con una tasa del 13%. En otras palabras, la Organización Internacional de las Migraciones denuncian que medio millón de mujeres son explotadas cada año en los mercados europeos de prostitución.

Relacionado Abolición o legalización: ¿Qué opinan los partidos sobre la prostitución?

Pese a las cifras, y que el PSOE se presenta como un partido plenamente abolicionista como solución para erradicar la lacra social de la prostitución y la trata de personas, el Gobierno de Pedro Sánchez no aclara si perseguirá penalmente a los clientes de la prostitución. "Se escucharán todas las opciones que haya. Hay varios modelos y hay que buscar el que mejor sirva dentro del encaje legal e institucional", ha dicho este lunes la delegada del Gobierno para la Violencia de Género, Pilar Llop.

En este sentido, ha recordado que el pasado 23 de noviembre el Gobierno vio un informe sobre el anteproyecto de la futura Ley de Integral contra la trata de seres humanos, al tiempo que ha dicho que se está trabajando en dicho texto "con el fin de hacer una sistematización de toda la legislación, actualmente dispersa, en esta materia".

Una lacra a nivel mundial

Trata de personas. EP

Y es que, cuando hablamos de trata de personas a nivel mundial, el 94% son mujeres y niñas que han sido arrancadas de sus vidas por mafias que, en ocasiones, les prometen falsos futuros de prosperidad. En otras ocasiones, directamente son raptadas y vendidas como un objeto más dentro del mercado capitalista. Una moneda de cambio que mueve millones de euros al año y que sesga otros tantos millones de vidas.

“Las instituciones y organizaciones encuentran una enorme dificultad para detectar estas situaciones y, por tanto, para conocer el número real de víctimas y ofrecerles la ayuda y el apoyo necesarios. A pesar de contar con unas cifras tan alarmantes, en general, la voluntad política de los gobiernos y sus inversiones en materia de protección y promoción de los derechos de las niñas y mujeres muestran un peligroso retroceso”, recuerda la Comisión para la Investigación de Malos Trato a Mujeres.

Relacionado Prostitución en auge

Se estima que entre 600.000 y 800.000 personas cruzan las fronteras internacionales como víctimas de trata y, de ellas, el 80% son mujeres y el 50 menores de edad. En el caso de la trata para explotación laboral, por la que se estima que 2,4 millones de personas están sometidas en el mundo a trabajos forzados, el 56% son mujeres y niñas.

Una de cada tres mujeres

Otro dato escalofriante nos muestra como una de cada tres mujeres declara haber sufrido algún tipo de violencia física o sexual al menos una vez en su vida, según ONU Mujeres y la Organización Mundial de la Salud. Además, son víctimas de la violación de sus derechos humanos con prácticas culturales como la mutilación genital femenina, la quema de viudas o el matrimonio forzado e infantil.

La trata de seres humanos es sólo una más de este tipo de violencias que afecta de forma desproporcionada a las mujeres y niñas de todo el mundo, no solo porque representan el mayor porcentaje de víctimas, sino por el severo nivel de violencia al que son sometidas, principalmente en los casos de trata con fines de explotación sexual.