Ir a la playa en verano es uno de los "deportes" favoritos de los españoles. Jugar a las palas, llevar una nevera con bebida fría o comer en la arena son algunas de las actividades preferidas tanto por los autóctonos como los turistas que vienen a disfrutar de nuestras costas. Sin embargo, hay algunas prácticas que, aunque están muy extendidas y son muy típicas, pueden saltarse la normativa tanto nacional como municipal, lo que puede conllevar multas que van desde los 300 hasta los 3.000 euros.

La Ley de Costas de 1988 establece determinadas disposiciones que son comunes para todo el territorio, como la prohibición de acampar o el uso privativo de las mismas, pero cada municipio tiene la posibilidad de regular la normativa de cada una de sus playas a través de sus ordenanzas locales. Por eso, te contamos cuáles son las actividades que pueden conllevar multas en las costas de nuestro país: estas van desde fumar hasta dejar la sombrilla para guardar un hueco lo más cerca posible del agua del mar.

Estas son las multas que te pueden poner en la playa

Como decimos, algunas conductas que tenemos en los literales de nuestro país son tan típicas como ilegales. Y es que muchas regiones han modificado sus normativas para incluir algunas prohibiciones para mejorar la convivencia y el buen estado de las costas y los mares. Muchas de ellas probablemente te sorprendan, ya que lo hacemos desde tiempos inmemorables.

Así, si no quieres que te multen durante tus vacaciones este verano, tienes que evitar llevar a cabo estas actividades en la playa:

1. Dejar la sombrilla para guardar sitio

Los vídeos de oleadas de personas corriendo con una sombrilla en la mano casi al amanecer por la arena para hacerse un hueco en primera línea se han convertido en virales en los últimos años, aunque se trata de una práctica muy típica en las costas españolas desde hace décadas. Y es que la sombrilla es un elemento cuyo uso se ha extendido, además de para taparnos del pleno sol durante las horas de más calor, para guardar sitio cerca de la orilla del mar.

Esto, sin embargo, está prohibido por la legislación de algunas regiones de nuestro país con multas que van desde los 300 hasta los 3.000 euros. La localidad malagueña de Torrox fue una de las precursoras en incluir esta orden en su ordenanza, concretamente lo hizo en 2014 en el artículo 14 de su normativa local, donde queda expresamente recogido el veto de reservar un espacio a cualquier hora del día o noche utilizando todo tipo de artículos, ya sea sombrillas como tumbonas, mesas y otros.

San Javier, en Murcia, modificó su ordenanza el pasado febrero para incluir una prohibición en su normativa, que además señala que si estos objetos se quedan solos en la arena y dificultan las labores de limpieza podrán ser retirados por la Policía Local. Uno de los últimos en sumarse ha sido el municipio valenciano de Cullera, que este año ha incluido esta norma para sus playas, emulando a otras localidades de España como Oropesa, Tarragona, Alicante, Cádiz y muchos más.

2. Fumar y tirar colillas

Una práctica que puede conllevar sanción menos conocida es la de fumar dentro de los límites de la arena y en el agua. Y es que algunos municipios de toda la península y las islas tienen terminantemente prohibido hacerlo con multas que van desde los 30 hasta los 2.000 euros. Es el caso de Mogán, en Gran Canaria, que abolió esta acción en 2012 en una decena de playas con sanciones hasta 1.800 euros en caso de arrojar colillas al suelo.

Dentro de la iniciativa Playas sin humo, otras ciudades se han sumado a esta normativa. Por ejemplo Barcelona, aunque se considera una falta leve y solo conlleva un castigo monetario de 30 euros en el caso de que se incumpla de forma reiterada. Más allá ha ido Andalucía, que este año ha 2022 la Red Andaluza de Servicios Sanitarios y Espacios Libres de Humo, una lista de 52 playas (la mayoría en Cádiz, Málaga y Almería) con el objetivo de ampliar las áreas libres de humo.

3. Escuchar música con altavoces

En más de una ocasión has escuchado la canción del verano sonando a tu alrededor mientras tomas el sol o incluso tu mismo lo has puesto con tus amigos gracias a un altavoz. Pues bien, aunque esto ameniza mucho la estancia, no en todos los lugares es legal hacerlo o, como mínimo, hay algunas limitaciones.

Es el caso de Valencia, que su normativa permite el uso de estos dispositivos siempre y cuando no se moleste al resto de usuarios. Eso sí, recomienda usar los auriculares para evitar problemas. Sin embargo sí recoge una excepción: las playas del Parque Natural de la Albufera, donde su uso está totalmente prohibido por la presencia de fauna protegida y su incumplimiento conlleva sanciones que van desde los 750 euros hasta los 1.500.

Tampoco se permite el uso de estos aparatos en Motril, Granada, donde la multa que puede alcanzar hasta los 300 euros. Algunos van más allá, como en la localidad cántabra de Laredo, donde la prohibición no solo se limita a las playas sino que también se extiende a sus inmediaciones y a la utilización de los altavoces de los coches para reproducir música. En este caso, la sanción aumenta hasta los 750 euros.

4. Meterse en el agua con bandera roja

Aunque bañarse en el mar con bandera roja no está recomendado para evitar tener incidentes con las mareas o con algunos animales visitantes, pocos saben que también puede ser objeto de castigo. Y es que la mayoría de los municipios de nuestras costas recogen en sus reglamentos esta limitación con sanciones bastante elevadas: llegan hasta los 3.000 euros.

En Cunit, localidad tarraconense, la multa por hacerlo puede ir desde los 1.501 a los 3.000 euros. Una cifra muy similar a la que tiene fijado Ibiza por este tipo de acciones, de 1.500 hasta 3.000 euros. También Gandía, en la provincia de Valencia, se indica esta prohibición, con sanciones que van de 751 hasta los 1.500 euros ya que se considera una infracción grave.

5. Orinar en el mar

Sí, hacer pis en la arena o incluso dentro del agua del mar está prohibido. En algunos lugares, como el término municipal de Málaga o Vigo, han incluido este mandato con una pena de 300 euros en el primer caso y hasta 750 en el segundo. También en Lepe, donde es considerada una infracción leve desde hace ya diez años. Para evitar que se produzcan estas acciones, los Ayuntamientos se han comprometido a instalar más aseos públicos accesibles en las zonas en las que no hay de forma permanente durante todo el año o donde haya un número bajo. 

6. Ducharse con jabón y champú

Quizás alguna vez has pensado en aprovechar las duchas públicas disponibles en las costas para, con un poco de jabón y champú, irte a casa perfectamente limpio. Pues bien, esto no es posible en muchos lugares, y no porque no haya grifos sino porque puede conllevar un susto para tu bolsillo. Esto es lo que ocurre en la localidad gaditana de Tarifa, donde no solo está prohibido esto sino tampoco lavar la ropa. Están consideradas infracciones leves y pueden comportar sanciones de hasta 750 euros.

También está indicado en las normativas de San Sebastián, donde se prohíbe el aseo con gel y champú en las duchas municipales y en el mar. En este caso, sin embargo, el correctivo es algo menor de 50 a 200 euros.

Si no quieres notar un agujero en tu cartera durante estas vacaciones, es recomendable que evites llevar a cabo estas prácticas en la playa. Con ello dejarás de pagar algunas multas y harás que la convivencia sea mejor, así como la conservación de las zonas comunes de nuestros tan valorados litorales.